Día 10. Itzcuintli (Perro)

Izquintli

En diversas mitologías del mundo, vemos que el perro es el guía que puede sacarnos de los mundos sumergidos, claro, si primero lo dominamos. Ese perro también lo cargamos en nuestro interior, se trata del instinto sexual. No es rechazándolo como lograremos que nos sirva de guía, sino, más bien, dominando nuestros impulsos sexuales negativos, trasmutando el deseo animal en amor verdadero.

El perro es, también, símbolo de la fidelidad que debemos tener a la pareja, a nuestros Maestros o guías espirituales, a la enseñanza que seguimos como orientación. El perro nos enseña a tener gratitud y fidelidad, pues la ingratitud y la traición siempre están hermanadas.

Dios regente: Indica lealtad, compañía. Itzcuintli aparece de color blanco con pintas negras, que son grandes, y un cerco oscuro en torno al ojo. En otros códices, ocasionalmente, el perro está pintado de rojo. Está regido por Mictlantecuhtli, Señor del Inframundo.

Posición del día en el Códice Borgia. En la punta de las flechas, pues es el instinto que, bien dirigido, puede destruir al agregado psicológico.

“Afortunadamente el perro Cerbero (el instinto sexual), guía la traílla que ayuda al caballero en su descomunal aventura. Hércules cogió a Cerbero, el perro de tres cabezas, y, a pesar de sus ladridos le sacó fuera del Tártaro, atado por el collar...” (Samael Aun Weor. El Parsifal Develado. Cap. 41)