Libro: La Flauta Mágica y la Iniciación

Capítulo 1. El Poder de la Palabra

Primer Acto. Escena 1

El poder de la Palabra. La Flauta Mágica. Mozart

A través de todas las edades en la historia y alrededor del mundo, podemos ver en cada leyenda, cuento y, sobre todo, muy especialmente en los libros sagrados, la eterna lucha entre las potencias del bien y del mal.

No debe extrañarnos que tal combate incesante, tan sabiamente descrito por los más grandes sabios, se lleve a cabo en las profundidades del inexplorado universo interior. Tales fuerzas del bien y del mal están representadas en la Flauta Mágica con dos templos: uno dedicado a la Luna, encabezado por la Reina de la Noche y otro templo, dedicado al Sol, dirigido por Sarastro, un sacerdote solar.

La luna y el sol siempre han sido objeto de infinidad de simbolismos, el aspirante a comprender estos misterios, deberá usar su corazón para comprenderlos. Es obvio que, en esta simbología, las ideas solares representadas por Sarastro, son las que se encaminan a la verdad, el bien, la sabiduría, la bondad, la veracidad y el amor; en sí, a los valores de la conciencia. Las ideas lunares son simbolizadas por la Reina de la Noche, vivo símbolo del mal, de la venganza, el odio, el rencor, de los miles y miles de defectos psicológicos que llevamos dentro. A un lado de todo templo de luz, siempre hay un templo de tinieblas.

Con nuestra imaginación creadora, trasladémonos a un lugar enigmático del antiguo Egipto: estamos en los dominios de la Reina de la Noche, se encuentra un espléndido templo entre las montañas, en una zona rocosa, con algunos árboles esparcidos por ahí nada más; la atmosfera de misterio en su conjunto nos invita a penetrar en los sagrados secretos del auto conocimiento.

El templo de la luna. La Flauta Mágica. Mozart

La Flauta Mágica sitúa el inicio de esta historia, precisamente en un sitio así, porque algunos templos de misterios están asociados a una zona pétrea, señalándonos el trabajo que habrá de hacerse a través de los misterios del apóstol Pedro, ya que este nombre viene de Patar o piedra, representando el trabajo con la transmutación de las energías creadoras.

Nos comenta el maestro Samael Aun Weor hablando del templo donde está el Santo Grial, en su libro del Parsifal Develado: “El paraje aquel de la escena, más que lóbrego resulta ciertamente bastante severo y misterioso... El terreno austero, indispensablemente rocoso, de acuerdo con las tradiciones Iniciáticas, resplandece en el centro con un espacio muy claro.”

El gran maestro Jesús, nos aclara el por qué debe iniciarse el trabajo de esta manera; al respecto nos dice que es necesario cimentar nuestra casa sobre la piedra y no sobre las arenas del desierto, que son las teorías, pues, por más que leamos y leamos, si no llevamos a la práctica la enseñanza, cualquier viento o inundación de adversidad nos lleva al fracaso.

Una gigantesca y temible serpiente persigue a un príncipe japonés llamado Tamino, que, si bien lleva un arco en su mano, su carcaj no tiene ya flechas. «¡Socorro! ¡Socorro! ¡Oh, estoy perdido! ¡Esa astuta serpiente me ha elegido por víctima! ¡Dioses misericordiosos! ¡La serpiente se acerca! ¡Ay, salvadme! ¡Ay, protegedme!»

Debemos ver a los protagonistas de la Flauta Mágica, como formas de actuar en el ser humano, de la actitud de nosotros ante la vida, de nuestro nivel del Ser o nivel espiritual que poseemos.

El príncipe Tamino es el ser humano sincero, que busca el camino a la verdad, que anhela reintegrarse con la divinidad, que quiere el regreso a la luz, muy raro en esta época superficial en que vivimos, habría que buscarlos con la linterna del filósofo griego Diógenes. Viene a ser el prototipo de persona que debemos anhelar ser y hacia los cuales está dirigida la gnosis.

Trata de luchar contra la enorme serpiente negativa, muy similar a la serpiente Midgar del libro sagrado de los Eddas germánicos; según este libro, esa serpiente inunda todo el mundo, y eso es una gran realidad: son las fuerzas bestiales pasionales que habitan en el interior de cada uno de nosotros. A pesar de los esfuerzos del príncipe Tamino, no tiene con qué luchar, posee el anhelo, pero no dispone de las claves para lograrlo, pues no lleva flechas.

Por lo que vemos el claro ejemplo del ser humano sincero, que lucha contra sus pasiones (serpiente), pero que no tiene en sus manos la ciencia de la gnosis o las claves para lograrlo (las flechas); pero hay algo que destaca y nos invita a la reflexión, Tamino clama en forma muy sincera, pide ayuda a los dioses, tal es la forma en que deberíamos actuar, invitándonos a no ser soberbios, a reconocer nuestra miseria interior, saber que necesitamos de la ayuda superior y pedirla con todas las fuerzas de nuestra alma y corazón. Muy a pesar de todos sus esfuerzos no puede contra la serpiente y cae desmayado.

Las tres damas

Las tres Damas. La Flauta Mágica. Mozart

Del templo surgen tres damas con un velo cubriendo su rostro, portando en sus manos jabalinas de plata y luchando valientemente contra la bestia, logran darle muerte. «¡Muere, monstruo, nuestro poder te mata! (Matan a la serpiente.) ¡Victoria! ¡Victoria! ¡Hemos efectuado la heroica hazaña! ¡Ese hombre ha sido liberado por la valentía de nuestro brazo!». Para interpretar estos símbolos debemos acudir a la antigua ciencia de la alquimia y a la milenaria cábala o ciencia de los números.

El número tres lo tendremos presente en toda la Flauta Mágica, ya que, de acuerdo al simbolismo de los números o cábala, nos representa: producción material y espiritual, la creación, hacer las cosas con belleza, arte, la madre celeste, las fuerzas creadoras y el Espíritu Santo; tomará cualquiera de estos significados dependiendo del mensaje que se quiera dar a entender.

La plata en alquimia significa la mujer, las fuerzas femeninas en acción. La jabalina es el emblema de la fuerza sexual debidamente transmutada y dirigida para dar muerte a la serpiente de nuestras pasiones bestiales.

El velo que cubre el rostro de las tres damas es el velo del misterio, el velo de Isis (nuestra madre divina), que solo puede rasgar el que se ha dominado a sí mismo completamente.

Son las tres damas la representación de las fuerzas creadoras del ser humano, las que nos trajeron a la vida, origen de mundos, bestias y hombres; la fuerza más poderosa del cosmos infinito, que puede ser utilizada para bien y liberarnos de las fuerzas tenebrosas de la serpiente, pero puede ser utilizada para el mal, esclavizándonos y llevándonos a la miseria y dolor.

En este caso, el número tres en estas mujeres, encontramos la posibilidad de utilizar correctamente las fuerzas de la creación matando a la serpiente de nuestras propias creaciones animales, o el mal uso que hacemos de las mismas, representado en la disputa vehemente de las damas por el príncipe Tamino: se dejan fascinar por la belleza del príncipe (la energía sexual mal encaminada) y nadie quiere dejarlo a solas, las tres quieren quedarse a cuidarlo mientras les insinúan a las otras que vayan a darle el mensaje a la Reina de la Noche, su ama gobernante.

«1ª DAMA: (contemplando a Tamino) ¡Un joven apuesto, delicado y bello! 2ª DAMA: ¡Tan bello como jamás vi otro! 3ª DAMA: ¡Sí, sí! ¡Tan bello, que es como para pintarlo! Las Tres Damas: Si consagrase mi corazón al amor, el elegido sería este joven. Vayamos donde está nuestra princesa a comunicarle la noticia de lo ocurrido: tal vez este hermoso joven pueda devolverle la calma perdida. 1ª DAMA: Id, pues, y decídselo. Yo me quedaré aquí. 2ª DAMA: ¡No, no! Id vosotras. ¡Yo velaré aquí por él! 3ª DAMA: ¡No, no! Eso no puede ser. Sólo yo lo protegeré. 1ª DAMA: ¡Pues yo me quedo aquí! 2ª DAMA: ¡Pues yo lo velaré! 3ª DAMA: ¡Pues yo lo protegeré! 1ª DAMA: Yo me quedo aquí. 2ª DAMA: Yo velaré. 3ª DAMA: Yo le protegeré. Las Tres Damas: ¡Yo, yo, yo! (Para sí) ¿Irme yo? ¡Ah, ah! ¡Qué bien! ¡A ellas les gustaría quedarse a solas con él! ¡No, no, esto no puede ser! ¡Qué no daría yo por poder vivir con este joven!¡Por tenerlo para mí sola! ¡Pero ninguna se va, no puede ser! Lo mejor es que me vaya yo. (En voz alta a Tamino) Oh, joven, bello y amable, oh, joven querido, ¡adiós! ¡Hasta que vuelva a verte!»

Por fin se van a las puertas de su templo y dejan solo a Tamino desmayado. Al poco tiempo se despierta, ve la serpiente muerta a sus pies, y escucha unos alegres sonidos de una flauta de Pan que poco a poco se van escuchando cada vez más cerca: es Papageno, un pajarero que además va vestido todo como pájaro, con plumas por todas partes, contento viene tocando y cantando. Carga una gran jaula en su espalda llena de pájaros que lleva al templo para dárselos a la Reina de la Noche, e intercambiarlos por pan, vino e higos.

Papageno

Papageno. La Flauta Mágica. MozartEs el ser humano que no busca el camino secreto, pero que no comete ningún delito, es el buen dueño de casa, simboliza a la persona que cumple con sus deberes en el hogar, es buen padre, buen hijo, buen ciudadano, pero no siente inquietudes por ingresar al camino secreto.

Su atuendo de animal (pájaro), es un indicativo que mucho de lo que poseemos actualmente en el ser humano, es todavía de naturaleza animal. Según su canto, lo único que anhela es una mujercita, con quien compartir su vida, sin ningún anhelo místico o trascendental.

«Yo soy el pajarero, siempre alegre, ¡ole, upa! Como pajarero soy conocido por viejos y jóvenes en todo el país. Cazo con reclamo y toco la flauta. Puedo estar alegre y contento, porque todos los pájaros son míos. Yo soy el pajarero, siempre alegre, ¡ole, upa! Como pajarero soy conocido por los viejos y los jóvenes en todo este país. ¡Me gustaría tener una red para muchachas, las cazaría por docenas! Luego las metería en la jaula y todas ellas serían mías. Si todas las muchachas fueran mías, las cambiaría por azúcar: y a la que yo más quisiera le daría enseguida el azúcar, y me besaría con delicadeza, si fuera mi mujer y yo su marido. Dormiría a mi lado y la acunaría como si fuese una niña.» (Aria: El pajarero yo soy)

En las aspiraciones de Papageno, visiblemente vemos representado el arcano seis del tarot, en su aspecto de enamorado; lo único que le interesa en el mundo es tener a su pareja, pero sin ningún fin de carácter superior.

¿Quién somos?

Tamino escucha todo el alegre canto de Papageno, prudentemente escondido; al terminar y ver que no había peligro, sale a su encuentro de tan singular personaje, quien ya se dirigía a las puertas del templo de la Reina de la Noche, y le pregunta quién es; la respuesta sencilla de Papageno, de ser un ser humano como cualquiera, la retorna a Tamino, el cual contesta que era hijo de un gran soberano, gobernador de varias comarcas.

La Flauta Mágica empieza a develar los basamentos de la iniciación; no podemos aspirar a que la gnosis, el conocimiento divino, florezca en nosotros, si no sabemos quién somos, las falsas ideas que tiene uno de sí mismo, tanto de una persona sencilla como Papageno, como la de una persona complicada como la de Tamino, resultan completamente superficiales, vanas y huecas.

Las bases en que descansamos psicológicamente, como la de considerarnos muy importantes por el hecho de dominar a muchas personas como el príncipe Tamino, son cosas sin la menor importancia para el espíritu, pero pensamos que el poder es lo máximo. La absoluta ignorancia de Papageno, de todo cuanto sucede fuera de esos lugares, y de su mismo nacimiento, en realidad es la ignorancia en la que estamos sumidos la humanidad entera en relación al conocimiento gnóstico trascendental.

Se requiere de mucho más, es necesario empezar a observarnos, con el fin de auto conocernos, para romper las ilusiones que tenemos de sí mismos. Existen muchos supuestos mentales que durante toda la vida llevamos considerando que son lo más real: el prestigio, el tener mucho dinero, las propiedades, los títulos, etc.

«Una persona descansa sobre una posición, otra sobre el dinero, etc. Lo más curioso, ya seamos ricos o mendigantes, es que necesitamos de todos y vivimos de todos, aunque estemos inflados de orgullo. Dentro de todo esto, nos creemos muy fuertes y somos espantosamente débiles. Es urgente Auto observarse, de momento en momento, con el propósito de conocer claramente los fundamentos sobre los que descansamos; cuando uno descubre aquello que más le ofende en un instante dado, entonces descubre las bases sobre las cuales descansa psicológicamente.» (Samael Aun Weor. Estudio del Yo)

La Mentira

La plática sigue su curso, Tamino se queda mirando a Papageno de forma muy extraña, pues está todo vestido de pájaro, y Papageno se siente intimidado, con un poco de miedo, y con el fin de salir de esa situación le dice que es muy fuerte. Esto provoca que Tamino crea que él ha dado muerte a la serpiente, y Papageno no lo desmiente, inclusive afirma que la ha estrangulado con sus propias manos.

Si ponemos un poco de observación a nuestra vida, nos daremos cuenta que son las emociones negativas las que nos llevan a la mentira, y esta se ha convertido en algo tan común que forma parte de nuestra vida cotidiana, nos enseñamos a mentir desde muy pequeños, sin darnos cuenta de las graves consecuencias que esto acarrea.

«Lo más grave es que las emociones negativas vuelven mentiroso al ser humano. La mentira produce una conexión equivocada, porque la energía del Anciano de los Días, que fluye armoniosa y perfecta a través de los diez Sephirot de la kábala hebraica, hasta llegar a Malchut, el reino, la persona física, psicofísica, en el mentiroso se conecta mal. Este produce una dislocación intencional de su mente y como consecuencia surge la mentira, es decir, una conexión equivocada.» (Samael Aun Weor, Conferencia sobre Alcione)

La mentira es lo contrario a la verdad, cuando uno miente se aleja por lo tanto del espíritu divinal. Si pretendemos acercarnos a lo que no tiene nombre, es obvio que nuestra conducta tiene que ser acorde a sus atributos, y si el Padre interno es la verdad, entonces cada vez que mentimos nos separamos del Padre y, al alejarnos del Padre, caemos en desgracia.

«Antes de que hables, pregúntate. Lo que voy a decir, ¿es útil?, ¿es bueno?, ¿es verdadero?, ¿es armonioso? Cuando no puedas contestar afirmativamente a estas preguntas, desciende al fondo mismo de tu conciencia. Parla, estudia, ve, observa, medita y pon una nota, una larga nota de silencio, al agrio diapasón de tus propias sugerencias… Si lo que vas a decir no tiene un ritmo perenne de armonía, súmete bajo tu capa y destruye en silencio tu propio acorde disonante. Fíjate que todo en la Naturaleza es ritmo… Que todo es Armonía… Cada palabra que salga de tus labios como filo tajante que impulse tu pasión, quiebra esas Leyes… Y el Alma muda, silenciosa, de las cosas mismas, se resiente y quebranta en su rítmico concierto…» (Arnoldo Krum Heller, Rosa Esotérica)

Castigo a Papageno

Llegan las tres damas que ya se habían dado cuenta de las mentiras de Papageno, él les entrega los pájaros y ellas en lugar de darle vino le dan agua, por pan le entregan una piedra y en lugar de higos dulces le ponen un candado de oro en la boca.

El mal uso del verbo, no sólo nos acarrea situaciones complicadas en la vida, aún más, afecta en la energía creadora, así lo vemos en los símbolos que recibe Papageno en lugar de los habituales.

Las tres damas están acostumbradas a darle pan de azúcar, vino e higos; el pan y el vino son elementos esenciales en la última cena del maestro Jesús, emblema de la posibilidad de transmutar las energías creadoras; no debemos olvidar que al buscar el mismo maestro higos en una higuera estéril, pero no los encuentra y pidió que la cortaran; interesante es saber que las criaturas elementales del departamento de la higuera se relacionan con las fuerzas que nos trajeron a la existencia.

Asombra ver la íntima relación que existe entre la palabra y el sexo; un adolescente al tener sus caracteres sexuales secundarios le cambia la voz, cuando uno envejece y pierde sus funciones sexuales, también le cambia la voz, no es de extrañarse que en la Flauta Mágica se dé a entender que con la mentira afectemos los procesos naturales de la energía sexual.

«Existe una íntima relación entre las glándulas sexuales y la laringe creadora. Cuando el niño llega a la edad de 14 años, su voz se transforma en la voz del hombre. Dicha transformación se debe a que entran en actividad las glándulas sexuales. ¡Así pues, es incontrovertible esa íntima relación entre las glándulas sexuales y la laringe creadora!» (Samael Aun Weor, Logos Mantram Teúrgia)

Quienes buscan la iniciación deben aprender a dar un uso adecuado a la energía sexual, pero resulta imposible por más que uno se esfuerce, si no tiene cuidado con el verbo, si miente, difama, levanta falsos, dice palabras en doble sentido, morbosas, critica, etc.; este verbo mal usado, cambiará la vibración de la energía sexual polarizándola en forma negativa.

Por lo que resulta interesante ver aquí los símbolos en forma contraria, indicando cómo el mal uso del verbo cambia la polaridad de la energía sexual, tornándola negativa. Por ello en lugar de ver trasmutadas las aguas en vino, tal como lo hiciera Jesús en las bodas de Caná, aquí en lugar de vino le dan agua; en lugar de pan le ofrecen una piedra y en lugar de dulces higos le ponen un candado en la boca.

Retrato

Pamina. La Flauta Magica de Mozart. GnosisLas tres damas le entregan, por orden de la Reina de la Noche, un retrato de su hija Pamina, El príncipe Tamino se enamora de inmediato al verla, y dice lleno de emoción:

«¡Este retrato es encantadoramente bello, ningún ojo ha visto otro igual! Siento cómo esta imagen divina llena mi corazón de emoción. Es verdad que soy incapaz de darle nombre, pero la siento arder en mi corazón. ¿Será amor esta sensación? ¡Sí, sí! ¡Es únicamente amor! ¡Oh, si pudiera encontrarla! ¡Oh, si ella estuviese ya ante mí! Yo.... yo..., de un modo cálido y puro... ¿Qué haría yo...? La estrecharía con delicia contra este pecho ardiente y entonces sería mía para siempre.» (Aria: Esta imagen es encantadoramente bella)

Interesantes palabras se colocan en voz del príncipe al ver anonadado el rostro de la princesa, nos habla al mismo tiempo de tratar de conquistar el alma divina. El padre interno o Ser emana de sí mismo un alma humana y un alma divina, son las almas gemelas, y el objetivo es que logren fusionarse en un matrimonio perfecto; las leyendas medievales del caballero luchando por su dama, dispuesto a los más grandes sacrificios, nos hablan de esa necesidad de llegar a lo divino, de unir lo terrenal con lo espiritual.

Pero a la vez, el príncipe nos habla del anhelo de encontrar en nuestra vida el amor. No nos dice que, si estamos casados, busquemos ese amor fuera del matrimonio, eso sería adulterio; nos habla de reencontrarnos con el amor en la pareja que en este instante tenemos, de ver en nuestra pareja la senda de la auto realización. Y claro, son muchos los defectos que nos impiden realizar ese anhelo, estos son: la auto consideración, la auto importancia, los celos, la ira, la intolerancia, la pasión animal, la lujuria, etc.

Entonces las tres damas, le informan que se trata de Pamina, hija de la Reina de la Noche, quien fue secuestrada por Sarastro un gobernante cruel, que tiene su palacio fuertemente resguardado. Inmediatamente el príncipe Tamino siente la urgente necesidad de rescatarla.

Aquí uno pensaría que se trata de un clásico rescate a la dama secuestrada por las potencias del mal, en realidad es algo mucho más profundo y a la vez tan común en nuestro diario vivir. Sarastro no es un gobernante cruel, todo lo contrario, es un sacerdote solar que cultiva los misterios de Isis, nuestra Divina Madre interior, y de Osiris el Padre que está en Secreto.

Es muy interesante lo que la Flauta Mágica trata de que entendamos; mucho de lo que creemos que está bien, resulta que está totalmente equivocado, y lo que creemos que está mal, por la información que recibimos de la sociedad, resulta que en el fondo está bien.

Ejemplo de ello tenemos que en el pasado hemos cometido grandes equivocaciones, basta recordar la “Santa inquisición”, en donde en el nombre de Dios, matamos, torturamos y cometimos cientos de crueldades, pero lo curioso es que en ese momento pensábamos que era lo más correcto. Ahora la degeneración sexual, el aborto y las drogas es de lo más normal, y uno lo considera como parte de nuestra vida, que es algo necesario y perfectamente justificable, cuando obviamente vamos por el camino equivocado.

Es increíble que uno se crea de sí mismo lo mejor, pero el espejo en que debemos vernos es el estado actual de nuestro mundo. Si hay guerras, hambres, pestes, enfermedades, crímenes y violencia, eso es la exteriorización de lo que llevamos dentro.

Más los engaños son muy sofisticados, se apela a todo, con el fin de que permanezcamos en el error, estos engaños se dirigen a los sentimientos más nobles, pero enmascarados en forma engañosa.

Reina de la Noche

La Reina de la Noche. La Flauta Mágica. Mozart

Se abren dos montañas, y surge entre rayos y truenos la Reina de la Noche, sentada en un trono de estrellas y le dice a Tamino a través de un hermosísimo canto, y acompañado de una melodía exquisita, que verdaderamente hace estremecer a todo quien lo escucha:

«¡No tiembles, querido hijo mío! Pues eres inocente, sabio y piadoso. Un joven como tú es el que mejor puede consolar este corazón de madre tan profundamente afligido. He sido elegida para sufrir, pues me falta mi hija; al perderla a ella, perdí toda mi dicha: un malvado me la quitó. Aún la veo temblar con atemorizada agitación, veo su angustiado sobresalto, sus tímidos esfuerzos. Hube de ver cómo me la robaban: "¡Ay, socorro!", eso fue todo lo que dijo; sólo que su súplica fue vana, pues mi fuerza era demasiado débil. Tú irás a liberarla, tú serás el salvador de mi hija. Y si te veo volver victorioso, tuya será para siempre.» (Aria: Oh, no te asustes querido hijo mío)

La música es inefable, los cantos son bellísimos, precisamente así son los engaños en los que nos vemos envueltos, ya por parte de la falsa sociedad, de la ciencia oficial encaminada al delito, o inclusive de la misma familia, que quizás se encuentre en el error, para que uno siga por el camino equivocado; toca las fibras más sensibles, pero nos dirige a una mentira, al abismo de la perdición en el cual estamos actualmente todos y ni siquiera lo percibimos; tomamos la senda siniestra, pero pensamos que hacemos bien.

«Recuerden que el camino que conduce al Abismo está empedrado de buenas intenciones. “Muchos son los llamados y pocos los escogidos”. Los malvados de todas las épocas han tenido muy buenas intenciones: Hitler, lleno de magníficas intenciones, atropelló a muchos pueblos y por su culpa murieron millones de personas. El verdugo que ejecuta una orden injusta, lleno de magníficas intenciones, asesina a sus semejantes. No debemos olvidar a la Santa Inquisición; entonces inquisidores con magníficas intenciones condenaron a muchos infelices a la hoguera, el potro, etc.» (Samael Aun Weor. Estudio del Yo)

Se cierran de nuevo las montañas al terminar el engaño de la Reina de la Noche y queda oculta de nuevo la sala con el altar de estrellas. Tamino queda desconcertado, todavía creyendo que ha sido como un sueño.

La Veracidad

Papageno entra en escena y se acerca a Tamino con su candado de oro en la boca, el cual no pueden quitar, resultado de la mentira; las tres damas aparecen y le levantan el castigo, ordenándole que jamás vuelva a mentir.

Es de suma importancia el cuidado que se tiene que tener con el verbo. Nos dice Santiago el Mayor en su Epístola Universal, que la lengua es como un pequeño fuego, pero capaz de crear los más grandes incendios, nos invita a reflexionar que de una fuente de agua cristalina (el verbo bien usado), no puede salir al mismo tiempo agua con veneno (el verbo mal utilizado).

¿Por qué la Flauta Mágica le da tanta importancia a la palabra?, ¿qué tiene que ver esto con la iniciación?, la realidad es que el verbo es sagrado; decimos en el Padre Nuestro: “Santificado sea tu nombre”, o sea el verbo divinal, la palabra creadora; esto implica darse cuenta que la divinidad creó todo lo existente a través del verbo, por lo tanto, es divino. La filosofía griega asocia el nombre de Logos a la divinidad y literalmente quiere decir: palabra, verbo.

El poder es el atributo del Espíritu Santo, el amor del Cristo y la verdad es el atributo del Padre interior, por lo que cada vez que mentimos, se establece como un corto circuito con eso que no tiene nombre. Es importante aprender a hablar cuando la esencia habla, y callar cuando la esencia calla.

«Debemos cultivar la sinceridad, porque en la sustancia de la sinceridad germinan las flores más bellas del espíritu.» (Samael Aun Weor. Rosa Ígnea)

Las tres damas le indican a Papageno que el candado es una advertencia, entonces todos comentan:

«Si a todos los mentirosos les pusieran un candado como éste en la boca: en vez de odio y calumnia, lo que habría sería amor y fraternidad».

Son innumerables las escenas fatídicas a que nos lleva el mal uso de la palabra. Sócrates comenta que cuando uno hace mal uso del verbo, no sólo se daña el cuerpo, sino también el alma. La palabra tiene una gran responsabilidad, debemos ser muy cuidadosos con lo que decimos y cómo lo decimos.

«A veces hablar es un delito, y otras callar también lo es. Es tan malo hablar cuando se debe callar, como callar cuando se debe hablar. Hay que aprender a manejar el verbo, y saber calcular con exactitud el resultado de nuestras palabras. Una misma palabra puede servir de bendición para una persona y de insulto para otra. Por ello es que antes de hablar una palabra debemos calcular muy bien su resultado. Los señores del Karma, juzgan las cosas por sus hechos, sin tener en cuenta las buenas intenciones.» (Samael Aun Weor. Rosa Ígnea)

El amor y la fraternidad reinarían en nuestros hogares, y como secuencia lógica, en la sociedad, si uno aprendiera a usar el verbo como es debido. Pero un problema muy grave son las emociones negativas, pues nos vuelven mentirosos.

Aunque es tremendamente difícil, en lugar de caer en la mentira o en la injuria, cuando alguien nos daña, deberíamos hacer todo lo contrario, hablar en bien de quien nos causó el daño. El maestro Samael nos indica, que hay que tratar de expresarse lo mejor posible de quien nos cause una emoción negativa, y así ésta no nos dañará en nuestro interior.

«Cuando ustedes sean asaltados por una emoción negativa, exprésense de ella lo mejor posible. Si una emoción negativa ha llegado, una emoción negativa de envidia nos está carcomiendo hasta la médula debemos expresarnos de ella en forma armoniosa, no en favor de la envidia, sino del bien ajeno.

Si una emoción de ira nos está sacudiendo en un instante dado, hablemos con una dulzura extraordinaria y, en vez de sentirnos molestos por aquello que nos ha herido, hablemos bien de aquel que nos ha ofendido. Así no seremos heridos internamente.

No es cosa fácil expresarse bien cuando se tiene una emoción negativa, pero así debe ser. Si tenemos una emoción de enojo, porque alguien nos ha molestado, hablemos con amor y en bien de aquel que nos ha molestado.» (Samael Aun Weor, Conferencia sobre Alcione)

La Flauta de Oro y el Carillón de Plata

Las tres damas le entregan una flauta de oro al príncipe Tamino, de tal poder que puede transformar las pasiones de los seres humanos, alegrar al triste, enamorar al soltero. A Papageno le dan un carillón de plata. Tales instrumentos son para protegerse de cualquier peligro.

«PRIMERA DAMA (le da a Tamino una flauta de oro): ¡Oh Príncipe, acepta este regalo! Te lo envía nuestra princesa. Esta flauta mágica te protegerá y sostendrá en las mayores desgracias. LAS TRES DAMAS: Te permitirá obrar con omnipotencia, transformar las pasiones de los hombres: el triste se pondrá alegre, el solterón se enamorará. TODOS: Oh, una flauta como ésta vale más que todo el oro y todas las coronas, pues con ella se incrementa la dicha y felicidad de los hombres».

Dos elementos fundamentales en la alquimia: el oro, símbolo de las fuerzas eléctricas magnéticas masculinas, y la plata de las femeninas.

La iniciación no es nada fácil. Se requiere de reunir muchas virtudes y acabar con muchos defectos. El camino no es para todos, afirma el dicho que por todos los caminos se llega a Roma, pero no se aplica en este caso, mejor debemos reflexionar en que el maestro Buda, en el libro del Dhammapada nos dice. «De entre los hombres pocos son los que alcanzan la otra orilla. Los demás andan en esta orilla, corriendo de un lado para otro», al respecto el maestro Jesús comenta: «De mil que me buscan uno me encuentra, de mil que me encuentran uno me sigue, de mil que me siguen, uno es mío» y Krishna en el Bhagavad Gita dice: «Entre miles de hombres tal vez uno intenta llegar a la perfección; entre los que intentan, posiblemente, uno logra la perfección, y entre los perfectos, quizás uno me conoce perfectamente», es muy claro que el camino es sólo para unos cuantos.

Nos señala con precisión, del trabajo con la plata y el oro: cuando un matrimonio sabe aprovechar las fuerzas magnéticas que lleva en su interior y que le rodean, pero no las desperdician, tienen el poder de protegerse de cualquier peligro y de transformar las emociones bajas en energías trascendentales.

El oro es el Sol, el padre, la plata es la luna, la madre. Tal como dijera una oración antiquísima atribuida al sabio Salomón, denominada el exorcismo del agua: “Sol ejus pater est, luna mater, et ventus hanc gestavit in utero suo” (El sol es su padre, la luna su madre y el viento la gestó en su vientre).

Nos habla de la necesidad de trabajar con la alquimia del amor. De aprender a utilizar la flauta de oro o fuerzas magnéticas masculinas y las campanillas de plata o fuerzas magnéticas femeninas. Así, cualquier obra que emprendamos podrá ser factible.

Por otro lado, la Flauta de oro también simboliza la misma gnosis, el conocimiento del Ser, la filosofía eterna y universal, un funcionalismo natural de la conciencia; la verdad, atributo del Padre interno, representado por el oro, el fuego y el Sol.

Las campanillas de plata nos hablan de la comprensión creadora, facultad que nos permite entender los grandes misterios, eliminar los defectos, entender a los demás. Comprensión es amor, atributo de la Madre divina, simbolizada por la plata, el agua y la luna.

Los Tres Geniecillos

Los Tres Geniecillos. La Flauta Mágica. Mozart

Es obvio que necesitamos de una guía que nos pueda conducir en el intrincado laberinto de teorías, afortunadamente existe, pero por estos días está abandonado. Nos referimos a la voz de la conciencia, al llamado del íntimo, representados por tres genios elementales de la naturaleza, quienes están llamados a guiar al príncipe Tamino y a Papageno.

Las Tres Damas: «Tres muchachos, jóvenes, bellos, nobles y sabios, os acompañarán en vuestro viaje; serán vuestros guías, seguid únicamente sus consejos.»

A quien aprenda a seguir el llamado del corazón nunca la hará falta nada. Ésa es la voz del silencio a la que hay que seguir, escuchar sus consejos, así no nos extraviaremos.

«La Doctrina del Ojo robustece la mente, por ello la mente materia es la morada del deseo: ella piensa, raciocina, analiza, saca conclusiones y conduce a la acción errada; todo lo quiere resolver por sí misma, sin tener en cuenta para nada la Voz del Maestro Interno. El Maestro Interno no analiza, ni razona, ni discurre, sino que su voz es la Voz de la Intuición. La Doctrina del Corazón abre las puertas de la sala de la Sabiduría.» (Samael Aun Weor. Curso Zodiacal)