La Sabiduría del Ser No. 86 Ciencia Arte Filosofía y Mística-Trimestre: julio, agosto y septiembre 2020 Material didáctico para uso interno y exclusivo de estudiantes Del Instituto Cultural Quetzalcóatl de Antropología Psicoanalítica, A.C. www.samalegnosis.net ? www.samaelgnosis.org www.samelgnosis.us ?www.samelgnosis.net/fr Contenido: La Ley del Destino 3 La Ética Revolucionaria 5 A Himsa, (la no violencia) 7 El Individuo y la Sociedad 9 La Tercera Guerra Mundial 12 La Ambición 15 La Mente-Corazón 17 La Pluralidad del Yo 19 Civilización y Barbarie 22 Los Tiempos del Fin 24 La Cooperación 26 Portada: La Virgen, el Niño Jesús y santa Ana, Leonardo da Vinci, Museo del Louvre, París. Revistas anteriores: https://www.samaelgnosis.net/revista/numeros.html Suscripciones: https://www.samaelgnosis.net/revista/suscripcion.htm Certificado de reserva de derechos al uso exclusivo. En el género de: Difusiones periódicas. Especie: Difusión vía red de Cómputo. Titular: Instituto Cultural Quetzalcóatl de Antropología Psicoanalítica, A.C. Titulo “La Sabiduría del Ser” Reserva: 04-2008-032711425000-203 Dirección de Reservas de Derechos. La Ley del Destino U na de las grandes inquietudes del ser humano es conocer sobre su destino, hay quienes buscan incluso adivinadores o se acercan a prácticas y artificios ocasionando con ello mayor confusión, desorientación y desasosiego, sin saber que el destino es relativo. En el capítulo 21 del Pistis Sophía, uno de los libros encontrados entre los rollos del mar muerto, María interroga a Jesús respecto a si los adivinadores pueden predecir el futuro; Jesús responde que solamente podrían hacerlo si el destino no pudiera ser alterado. Además de la ley del destino, existen otras leyes que convergen en la vida del ser humano, como la ley del karma y la ley de los accidentes; se vuelve complicado pronosticar a la generalidad de los seres humanos el porvenir, al igual que es difícil saber el paradero de una máquina en movimiento y sometida a la ley de los accidentes. “La ley del destino y el karma controlan a la esencia y en forma relativa también controlan a la personalidad”. Esencia y personalidad son diferentes, con la esencia se nace, al principio es prístina y poco a poco se va embotellando en los agregados psicológicos, mientras que la personalidad es una energía de tipo mental que se va desarrollando de acuerdo a la educación en el hogar y en la escuela, al medio ambiente, las costumbres, etc. Los agregados psicológicos van robusteciendo a la personalidad, mientras que van debilitando a la esencia. Se puede considerar que no todo es karma, y que el cincuenta por ciento de los sufrimientos y amarguras del ser humano son resultado de accidentes, porque la miseria, el crimen, el robo, la falta de caridad, que son productos de la falsa educación de la personalidad, ocasionan infelicidad y no tiene que ver con el karma, sino con acciones desalmadas que se cultivan en el seno del hogar, en las escuelas y en las calles. La sociedad primero educa a los niños y permite entretenimientos de violencia, burla, egoísmo, crueldad y enajenación y más tarde los castiga cuando se vuelven delincuentes. Después, el ser humano culpa a Dios de todos los sufrimientos; mientras que la gran realidad es que Dios no es quien ha creado el dolor y la miseria, somos nosotros los creadores. Al venir al mundo, los ángeles del destino depositan en los tres cerebros (Intelectual, emocional y motor-instintivo-sexual) determinado capital de valores vitales, la herencia está al servicio del karma); si estos valores son malgastados, entonces la vida se verá interrumpida, así como cuando alguien sale de viaje y lleva su capital, pero si no sabe gastar su dinero, entonces su viaje termina más pronto. En cambio, si sabe ahorrar y usar equilibradamente sus valores, entonces su vida se alarga. La cantidad de valores que a cada cual se le otorga por ley del karma se determina de acuerdo a las pasadas existencias, ya que es necesario comprender que antes de esta vida tuvimos no sólo una, sino muchas otras. Así cada cual nace con su propio destino, algunos en las mejores condiciones y otros en circunstancias muy difíciles, si se hizo el bien en la pasada existencia, ahora se recoge el premio, nada falta en el hogar y tiene comodidades de toda especie, pero si se hizo el mal, se dio rienda suelta a los instintos, si fue avaro, si explotó al prójimo, si cometió el error de robar o arruinar a otros, si se hizo mal uso del dinero, es evidente que le toca volver entre familias de miserables, infeliz, desnutrido. Así cada cual recoge el fruto de sus propias acciones. La predestinación existe de tal forma que si roba, le robarán, si mata, le matarán, etc., con la vara que medimos, seremos medidos, por ley de recurrencia, cada cual nace con su propio destino, pero también cada cual puede empeorarlo o mejorarlo; se empeora si además de tener karma, sigue haciendo el mal y deja de hacer el bien, pudiéndose hacer; el sufrimiento se incrementa si, además desarrolla una personalidad orgullosa, rencorosa, vengativa, intolerante. El destino puede modificarse para mejor, haciendo muchas obras de caridad, dedicándose al bien, practicando las obras de misericordia, porque cuando una ley inferior es trascendida por una ley superior, la ley superior, lava a la ley inferior, así es como el destino, con cada acción se va modificando. Es ahí donde el libre albedrío cambia el rumbo del destino. Por ejemplo, si alguien es agredido, tiene unos instantes de segundo para decidir, si decide golpear y hasta matar, podría terminar en la cárcel, pero si decide controlar sus emociones, su destino es diferente. Ante una invitación de drogas, cada quien decide si tomarla o rechazarla y de su decisión depende su destino. La adolescente puede ser tentada para tener relaciones sexuales, y su decisión en ese momento alterará su destino. El error es pensar que sólo se tiene esta vida (ignorar la ley del retorno) y desconocer los misterios de la muerte, pero el desconocimiento de la ley no exime su cumplimiento. Cuando un bebé muere al nacer, pareciera un hecho inmisericorde, y sin embargo es la dura lección para los padres, que fueron crueles con sus hijos en la vida anterior y con ese sufrimiento mejoran, aprenden a amar. Se puede decir que cada alma es el artífice de su propio destino, porque cuando nace trae el fruto de lo que sembró en sus vidas pasadas y con cada una de sus acciones (a través de su personalidad), va cambiando el curso para mejor o para peor. Cuando se trabaja por el despertar de la consciencia, se va desarrollando la ley de la epigénesis, la capacidad para originar nuevas circunstancias, es obvio que los Hombres Auténticos, con voluntad consciente pueden modificar su destino y originar un nuevo orden de cosas. Poema de don Ramón del Valle Inclán: ROSA GNÓSTICA "Nada será que no haya sido antes. Nada será para no ser mañana. Eternidad son todos los instantes, Que mide el grano que el reloj desgrana." "Eternidad la gracia de la cosa, y la alondra primera que abre el día, Y la oruga, y su flor la mariposa. ¡Eterna en culpa la conciencia mía!" "Al borde del camino recostado como gusano que germina en lodo, siento la negra angustia del pecado, Como la divina aspiración al Todo." "El gnóstico misterio está presente en el quieto volar de la paloma, y el pecado del mundo en la serpiente (tentadora) Que muerde el pie del ángel que la doma." "Sobre la eterna noche del pasado Se abre la eterna noche del mañana. ¡Cada hora, una larva del pecado! ¡Y el símbolo la serpiente y la manzana! "Guarda el tiempo el enigma de las Formas, como un dragón sobre los mundos vela, y el Todo y la Unidad, supremas normas, Tejen el Infinito de su estela". "Nada apaga el hervor de los crisoles, en su fondo sellada está la eterna idea de Platón. Lejanos soles Un día encenderán nuestra caverna". "Mientras hilan las parcas mi mortaja, Una cruz de ceniza hago en la frente. el tiempo es la carcoma que trabaja por Satanás. ¡Y Dios es el presente!" "¡Todo es Eternidad! ¡Todo fue antes! ¡Y todo lo que es hoy será después, en el instante que abre los instantes, ¡Y el hoyo de la muerte a nuestros pies!" Enviado por: Susana Margarita Rodríguez Licea. Comisión de Eventos del ICQ. Imagen: Himno al Sol Naciente Año:1869 Autor: Fedor Andreevich Bronnikov La Ética Revolucionaria H ola amigos, cómo están? Para iniciar este tema, primero definiremos que significa ética: La ética, o filosofía moral, es la rama de la filosofía que estudia la conducta humana: lo correcto y lo incorrecto; lo bueno y lo malo, la moral, el buen vivir, la virtud, la felicidad y el deber. Una vez que hemos definido el concepto de ética podemos iniciar nuestro tema: La Gnosis tiene su doctrina propia y ética revolucionaria. La ética de la revolución en marcha, se basa en la disolución del yo. Todos nosotros, queremos una sociedad sin clases, un mundo mejor, pero esto es imposible sin una ética revolucionaria. Revolución es un cambio total, una transformación en nosotros, un cambio radical para lograr un recto pensar, un recto sentir y un recto actuar. Es urgente contemplar el valle desde la altura majestuosa de la colina de la ley. Revolución es una lucha continua, permanente para mejorar y encontrar la verdad de nuestra existencia. Para ello necesitamos disolver el yo, que es un obstáculo para el orden revolucionario. Si de verdad queremos esta revolución, si de verdad queremos este cambio; necesitamos con urgencia, con una alta psicología, comprender cada defecto psicológico que tenemos, no sólo en el centro intelectual, sino también en los terrenos subconscientes de la mente. La comprensión integral de la mente es el primer paso, después tenemos que ir más lejos. La mente por sí sola no puede reducir a polvareda cósmica ningún defecto. La mente, lo único que puede hacer es pasar los defectos psicológicos a otros terrenos psicológicos de la mente, esto finalmente no resuelve nada, por el contrario, sigue fortaleciendo al defecto psicológico. Nosotros necesitamos de cambios radicales y profundos, con la comprensión integral a través de la meditación profunda que va más allá de entender o razonar, si es que de verdad queremos transformarnos radicalmente. Los defectos secretos que tantos miles de ellos tenemos, se convierten en resortes íntimos de la acción. No puede existir una recta acción, recto pensar, recto sentir, mientras tengamos defectos secretos. Cuando en Meditación logremos un estado de Éxtasis podemos contemplar el valle profundo de la mente desde la colina del Espíritu, de nuestro Ser. Este espectáculo es maravilloso porque entonces conocemos por experiencia propia e incomunicable, no solo nuestros defectos personales, sino también las raíces más íntimas de estos yoes. Existen muchos sujetos de aparente santidad que en el mundo asombran por su humildad, pero en otros terrenos del subconsciente de la mente son malvados y hasta espantosamente perversos. Todo defecto personal termina cuando se extrae de raíz. Solo la vivencia de algo muy profundo que se esconde íntimamente dentro de cada defecto, puede permitirnos extraer las raíces de cada defecto psicológico. Realmente lo único que debe interesarnos, es lo que somos en el presente, aquí y ahora. En cada uno de nosotros, existe un doble aspecto de personalidad y esencia. Lamentablemente y para colmo de males, la esencia está embotellada en el yo, el agregado de tipo psicológico. Muchas personas se visten con bellas túnicas, si estamos embotellados entre el yo ¿de qué sirve vestirnos de hierofantes?, ¿de qué sirve creernos gurús?, si nuestra esencia no se puede manifestar, está embotellada entre todos esos elementos subjetivos que son el “yo”. Necesitamos comprender cada defecto en todos los terrenos subconscientes de la mente. Necesitamos liberar la esencia, para cristalizar alma, y se manifieste nuestro Ser, lo Real en nosotros. La energía atómica del espíritu, que es Nuestra Madre Divina, vuelve polvo cósmico a cualquier defecto. Dentro de todo defecto personal existe una verdad que es su antídoto. Aquí estamos hablando de una virtud que se libera cuando eliminamos un defecto. Sólo la verdad nos hace libres, la verdad es lo desconocido de momento en momento. El yo se reduce a polvo, cuando el sol de la verdad lo quema. La verdad no es estática, la verdad es revolución de la mente, la verdad es dinámica y se halla escondida en el fondo de cada defecto, sólo disolviendo al yo, podemos hacer un mundo mejor para nosotros; la disolución del yo es revolución radical, total y definitiva. “La Madre debe convertirse en un lago sereno y sin tempestades, donde se refleje todo el panorama del cielo estrellado.” “El Libro Amarillo” Samael Aun Weor Enviado por: Carlos Rea Zamora y Ma. Guadalupe Inclán Castillo (Colaboradores del ICQ Internet) Imágenes: Poema del alma en la montaña autor Louis Janmot año-1850 Bibliografía: Cap. 45 “Transformación Social de la Humanidad” SAW A Himsa, (la no violencia) S i nos detenemos por un instante en nuestra vida y la observamos, nos damos cuenta que la mayoría de ella está basada en sistemas de violencia, y no estamos hablando de la violencia que ya es demasiado palpable a nuestro alrededor, sino de la misma violencia con la que nos desenvolvemos cada uno de nosotros diariamente. Para poder comprender este aspecto podemos mencionar lo siguiente: vemos que, cuando queremos algo que nos es difícil alcanzar por méritos propios o que simplemente queremos sobresalir y buscar la aceptación de otros, lo buscamos siempre con una base de violencia y no estamos hablando de golpes físicos, o daños físicos palpables, nos estamos refiriendo a daños que van más allá de éstos, por ejemplo si deseamos un puesto en algún trabajo, nos dedicamos a hablar mal de aquellos que suponemos son una competencia para nosotros, y tratamos de hacer que queden mal ante todos, y lo que es peor, nos engañamos a sí mismos diciendo que estamos haciendo bien, y puede ser que logremos ese puesto que tanto codiciamos, sin embargo, bien vale la pena recordar que todo lo que hacemos tarde que temprano cae sobre nosotros como un rayo de venganza, recordemos que existe una ley superior, que es la ley del karma, que ya todos conocemos. No debemos olvidar que la violencia engendra más violencia y el odio engendra más odio. La violencia jamás ha servido para hacer un mundo mejor, y bien podemos recordar aquellas palabras que mencionara Mahatma Gandhi promotor del A Himsa: "La no violencia no consiste en renunciar a toda lucha real contra el mal. La no violencia, tal como yo la concibo, entabla una campaña más activa contra el mal que la Ley del Talión, cuya naturaleza misma da por resultado el desarrollo de la perversidad. Yo levanto frente a lo inmoral una oposición mental y, por consiguiente, moral. Trato de enmohecer la espada del tirano, no cruzándola con un acero mejor afilado, sino defraudando su esperanza al no ofrecer resistencia física alguna. Él encontrará en mí una resistencia del alma que escapará a su asalto. Esta resistencia, primeramente, le cegará y enseguida le obligará a doblegarse. Y el hecho de doblegarse no humillará al agresor, sino que le dignificará"... Comenta el maestro Samael: “A himsa es precisamente: A = No, Himsa = significa querer matar, querer perjudicar, etc. "A-Himsa", es pues, el renunciamiento total a toda intención de muerte o de daño ocasionado por la violencia. A-Himsa es lo contrario del egoísmo. El A-Himsa es no-violencia en pensamiento, palabra y obra; el A-Himsa es respeto a las ideas ajenas, respeto a todas las religiones, escuelas, sectas, organizaciones, etc. A-Himsa es recta acción. A-Himsa es amor radical y cien por cien práctico.” ¿Cómo lograr el A Himsa? No es de la noche a la mañana que va a cambiar nuestro alrededor, ni por arte de magia que nosotros mismos dejaremos de ser violentos, se necesita que cambiemos cada uno desde el interior y solo entonces nuestro alrededor podrá cambiar. Para ser diferentes internamente, necesitamos comprender que todos cargamos con infinidad de defectos de tipo psicológico, los cuales ya han sido mencionados por las grandes culturas que han surgido en nuestro mundo, tales como: “los demonios rojos de Seth”, entre los egipcios, “los 400 surianos para los aztecas,” los señores de Xibalbá” señalados por los mayas, etc. quienes utilizan la personalidad como instrumento de acción. Por ello el maestro Samael nos explica: “El personalismo resulta de esa mezcla de ego y personalidad, el culto a la personalidad fue inventado por el yo. Realmente el personalismo engendra egoísmos, odios, violencias, produce anarquía y confusión. No podemos esperar que el yo evolucione porque el yo no se perfecciona jamás, necesitamos una total revolución de la conciencia. Conforme morimos internamente de instante en instante, la concordia entre los hombres se va desarrollando lentamente. Conforme morimos de instante en instante, el sentido de la cooperación va desplazando totalmente al sentido de la competencia. Conforme morimos de momento en momento, la buena voluntad va desplazando poco a poco, a la mala voluntad. El yo fue creado por nuestra propia mente y dejará de existir cuando lo hayamos comprendido totalmente en todos sus niveles de la mente. Sólo a través de la recta acción, recta meditación, recta voluntad, rectos medios de vida, recto esfuerzo y recta memoria, podemos disolver el yo. Es urgente comprender a fondo todo esto si realmente queremos la Revolución de la Dialéctica. Los hombres de buena voluntad aceptan el A Himsa; Resulta imposible iniciar un nuevo orden de nuestra psiquis excluyendo a la doctrina de la no violencia. El A Himsa debe cultivarse en los hogares siguiendo la senda del Matrimonio Perfecto. Sólo con la no violencia en pensamiento, en palabra y en obra, puede reinar la felicidad en los hogares. El A Himsa debe ser el fundamento del diario vivir, en la oficina, en el taller, en el campo, en el hogar, en la calle, etc. Debemos vivir la doctrina de la no violencia.” Con estas palabras comprendemos que si no morimos de instante en instante, seguiremos dominados por los defectos de tipo psicológico que tan miserable hace nuestras vidas y son los que nos conducen a múltiples fracasos, no son los demás los que nos hacen sufrir, no es con el tiempo con el que todo va a cambiar, si seguimos como hasta ahora, nuestras vidas jamás cambiarán. Para poder eliminar los defectos de tipo psicológico que nos conducen a la violencia necesitamos trabajar intensamente sobre sí mismos, primero auto observándonos, siendo sinceros consigo mismos para poder estudiar cada uno de esos defectos y después poder comprenderlos y eliminarlos de nuestro interior. Enviado por: Instructora Gnóstica María Guadalupe Rodríguez Licea. Cursos de Gnosis por Internet Imágenes: 1. William-Adolphe Bouguereau: The Virgin of the Lamb. 2.. Mosaic of the archangel Uriel in St John’s Church, Boreham Road, Warminster, Wiltshire, England. Bibliografía: Samael Aun Weor, libros: Revolución de la Dialéctica y Cristo Social. El Individuo y la Sociedad E n su libro “El Cristo Social”, año 1961, el maestro Samael ya nos advertía del peligro comunista para América latina, teniendo como puerta de entrada la conocida isla caribeña, detrás de la cual están los países de la hoz y el martillo; y el dragón chino. Hoy en día el comunismo es llamado “humanismo”, “progresismo”. Con dádivas de dineros mensuales pretenden engañar a las multitudes proletarias, presentándoles un aparente nuevo orden económico, político, educativo y hasta religioso; también conocido como el nuevo orden mundial. Por otro lado, América Latina sufre el asedio del imperio capitalista hoy llamado neo-liberalismo, cuyo principal actor es el país de las barras y las estrellas, llamado también "El tío Sam"; desde entonces hasta nuestros días, la situación no solo no ha cambiado, sino que ha empeorado. Las protestas raciales de principios de junio del 2020 en aquel país fueron avivadas por grupos subversivos izquierdistas, si antes el maestro Samael afirmaba que América latina estaba en peligro por el asedio comunista, hoy afirmamos categóricamente que es todo el continente americano. Los sistemas económicos mundiales llámense capitalistas o comunistas han empobrecido a la humanidad, el hambre y la miseria se ve por doquier. Ha llegado el momento de reflexionar sobre nuestro propio destino. Las grandes potencias del mundo desde hace tiempo han puesto su mirada en Latinoamérica. ¿Objetivo?, apoderarse de sus riquezas naturales, obtener mano de obra barata. Además de reducir la población mundial porque dicen que los recursos naturales no renovables se agotan. Los comunistas ahora llamados “humanistas” crean leyes para promover el infrasexualismo desde los mal llamados centros educativos, con el fin de que en el futuro ya no existan familias que tengan descendencia; los movimientos que se fundamentan en la sexualidad de tipo inferior, son promovido en los medios masivos de comunicación y se le pretende hacer ver como “algo normal”. El infrasexualismo ha invadido a todas las culturas y credos religiosos de todo el mundo, incluyendo las cúpulas más elevadas de la curia romana cuyo líder principal afirma que el infierno no existe. Empero, los practicantes de la antropología gnóstica sabemos que dimensiones superiores e inferiores son una tremenda realidad. Durante décadas América latina ha estado bajo la influencia del tío Sam, con su sistema capitalista y su mal llamada “democracia” y “libertad”, millones de campesinos y obreros han sufrido pobreza, hambre y explotación por parte de los plutócratas, los grandes monopolios y sindicatos. Se persigue al que no tiene dinero para pagar un puesto en los mercados públicos, y pueda vender sus productos; se adula y se alaba a los poderosos señores que roban millones de pesos a los pueblos; mientras que la gente de a pie tiene salarios de miseria. Muchos políticos han amasado fortunas millonarias a costa de los pueblos humillados y engañados por falsas promesas electorales. Así es como los capitalistas han abonado el terreno y lo han preparado para que en él germine la flor inmunda del comunismo. Aquellos que idearon el sistema económico capitalista son los mismos que apoyaron a Carlos Marx en la difusión de su jerga comunista contaminando al mundo con ideas escépticas y ateístas. Planearon y ejecutaron la primera y segunda guerra mundial y ahora están muy activos trabajando en la tercera guerra mundial, misma que ya comenzó con ataques de virus por todo el mundo. Hoy, América latina es un rico bocado para el nuevo orden mundial, que en el fondo es comunista y viene reforzado con el uso de nuevas tecnologías como el 5G, para tener un estricto control de la población global. Es de ilusos pensar que el sistema capitalista nos va a mejorar la vida como sociedad, o que si cambiamos al régimen comunista estaremos mejor, sabido es que este último es más brutalizante, ya que limita aún peor cualquier margen de libertad económica, educativa, política, religiosa y hasta razonativa. El maestro Samael, por el hecho de haberse sacrificado por las razas humanas en diferentes mahanvantaras y de distintos mundos, incluido el nuestro, entregando el conocimiento de la gnosis, sabe los rasgos psicológicos de diversas humanidades; en una de sus obras, nos mencionó el caso de las hormigas y abejas, mismas que en periodos cósmicos muy antiguos fueron poderosas civilizaciones que cayeron en el comunismo, desarrollaron una sociedad mecanicista, carente de principios espirituales, no necesitaron razonar en un momento dado, cada quien sabía de memoria lo que tenía que hacer, por lo que perdieron la inteligencia. Trabajaban exhaustivamente sin que nadie se beneficiara de la riqueza acumulada y degeneraron en esos animalitos involutivos que hoy son; a través de millones de años de involución. Si observamos por ejemplo un hormiguero, nos sorprende la estricta organización social que tiene, hay hormigas obreras, soldados y la reina. Cada cual sabe su trabajo, del cual nadie se beneficia, viven en un régimen de esclavitud. Por ley de recurrencia, hay una camarilla de gentes que se sienten muy “sabias” y pretenden llevar a la humanidad actual a un comunismo mundial, tal como ocurriera hace millones de años con aquellos seres humanos que hoy son hormigas o abejas. Ante esta terrible situación que vive la humanidad, el maestro Samael Aun Weor advierte la necesidad de que la gente tenga una correcta orientación y que no se deje arrastrar por conceptos de extrema derecha o de extrema izquierda, en ambos extremos existe el fanatismo el cual, suele terminar en intensas luchas ideológicas. El maestro, en este sentido, nos señala la necesidad de la creación de un sistema político diferente para América latina, que incluya a todas las clases sociales, fundamentado en sus libros; el Cristo Social y Transformación Social de la Humanidad. Dentro de los cuales se invita a que las clases sociales pobres tengan acceso a una auténtica educación, no a la educación manipulada y controlada que nos dan hoy en día, a un nivel de vida económico más justo, el pago de mano de obra barata es otra forma de esclavitud por parte de las grandes compañías transnacionales, los servicios de salud, derecho a vivienda digna, seguridad social debe estar al alcance de todos. Los dirigentes políticos, líderes sindicales, gobernantes; deberán ser solo administradores de la riqueza del pueblo, deben recibir solo su salario justo, no saquear las arcas de la sociedad; deberá haber libertad de cultos, derecho a la salud, etc. Para que lo anteriormente señalado sea posible es indispensable un aumento de conciencia en cada persona, si el individuo cambia, la sociedad también, la sociedad es la extensión del individuo. Tal individuo, tal sociedad. De nada sirve proclamar justo reparto de la riqueza para todos si el individuo tiene yoes de la avaricia, del egoísmo, de la crueldad y del robo dentro de sí mismo, de nada sirve reclamar justicia social si somos injustos con nuestros semejantes. Solo con inteligencia podremos resolver los problemas del hambre y de la miseria, no es con violencia como podremos vencer al comunismo, de nada sirven las revoluciones de sangre sino para llenar al mundo de más dolor y miseria. Únicamente con inteligencia podemos vencer a este monstruo fatal. Solo explicando los principios de la gnosis podemos difundir la luz y disipar las tinieblas, es indispensable analizar los principios de la dialéctica Marxista y demostrarle al mundo que no resisten un análisis de fondo. Debemos hacer luz en las tinieblas sin derramar sangre. Es urgente transformarnos como individuos, eliminar los factores del egoísmo y de la crueldad de nuestra psiquis para que la sociedad cambie. Solo acabando con los factores de la crueldad y del egoísmo dentro de nosotros es cómo podemos vencer el problema del comunismo Hoy América y el mundo están en un grave peligro y solo transformándonos como individuos y como sociedad podremos salvarla y salvarnos. Solo trabajando en nuestra transformación psicológica, creando conciencia y amor a la humanidad podremos modificar el karma individual y en consecuencia el karma de las naciones. Es claro y definitivo que la ley del karma gobierna la política mundial y la humanidad tiene demasiado karma pendiente, si pudiéramos ver desde el mundo causal, cómo la justicia divina maneja la política, veríamos un tablero de ajedrez en el cual la ley mueve fichas blancas y fichas negras, en ocasiones deja ganar a las fichas negras para que la humanidad page cuentas pendientes, hay veces que ganan las fichas blancas, entonces a alguna nación le va bien en el mundo físico. Por otra parte, hoy en día, la logia negra está completamente metida en el capitalismo y en el comunismo. El maestro Samael advirtió al estudiantado gnóstico que, si quería progresar en el camino espiritual, era prudente alejarse de las peleas o enfrentamientos. Ya que podría corromperse y desviarse del camino. El movimiento gnóstico propone el Cristo centrismo, es decir, que cada ser humano se torne consciente de sí mismo, de este modo, no habrá necesidad de líderes sociales, jefes o gobernantes, porque cada ser humano en la Tierra será un auto gobierno. El Cristo Social será una realidad en la edad de Oro de la futura raza que se llamará Koradhi. Esta doctrina se vive en toda humanidad avanzada del sistema solar o de cualquier parte del universo. Pues bien, mis estimados amigos, hasta aquí el presente capítulo de nuestra revista, esperando que les dé luz en su entendimiento, fraternalmente: Enviado por: Virgilio Cuautle Roldán, instructor gnóstico de Nochistlán Zac. Imágenes: 1. Pandora abre la caja Año: 1903 Autor: John William Waterhouse.2. John Waterhouse – Diogenes 1882. La Tercera Guerra Mundial E l mundo ha vivido durante mucho tiempo con el fantasma de la tercera guerra mundial; algunos analistas dicen que ya empezó con la pandemia del covid – 19, de la cual se habla mucho en medios de comunicación digital y en algunos tradicionales, en el sentido de que fue provocada por los grandes intereses geo financieros, que tienen un amplio abanico de estrategias para conseguir sus propósitos de dominio mundial e instaurar en el globo planetario su visión de orden mundial, todo, ante la mirada atónita de las masas dormidas que no se explican el porqué de lo que están viviendo, y ni remotamente intuyen la mano que mece la cuna. El Maestro Samael Aun Weor aclara: Desde la noche profunda de los siglos existe la hermandad del delito, la fraternidad tenebrosa. Quien haya estudiado los Protocolos de los Sabios de Sion comprenderá los planes y proyectos de la fraternidad tenebrosa. Esta tiene su programa de acción y sus vínculos humanos de expresión, uno de ellos son las guerras. Realmente lo que sucede es que jamás se ha peleado por ideologías; las guerras son siempre por cuestión de intereses económicos. ¡No son los pueblos los que inventan las guerras!, éstas se deben siempre a las camarillas de los poderosos, cuestión de mercados. Los poderosos son los que inventan las guerras; es doloroso ver a los pobres pueblos engañados por los grupos de potentados, estos señores les hacen creer a los pueblos que se debe pelear por la patria en peligro, por la religión, por la democracia, por la causa del proletariado, etc., etc., etc., entonces los pueblos engañados van al matadero, eso es todo, aún las mismas guerras medievales de las cruzadas se debieron a los mercados de especies; eso fue todo. Los poderosos engañaron a los pueblos haciéndoles creer que se debía pelear contra los moros por la conquista del santo sepulcro, la tierra santa, el cristianismo, etc., todo eso fue un engaño, la guerra fue por la cuestión del mercado de especies, a los capitalistas europeos les interesaba el control absoluto de todos los mercados de especies. La segunda guerra mundial se debió a cuestión de mercados. Hitler llevó a su pueblo a la guerra, por cuestión de mercados. Alemania necesitaba abrirse paso en el comercio internacional, la competencia de mercados era terrible, y Hitler lleno de ambición, sólo vio el camino equivocado de la violencia para la conquista mundial, la segunda guerra mundial es en el fondo una repetición de la primera. Con los acontecimientos que estamos viviendo, se puede decir que la tercera guerra mundial ya comenzó en su modalidad de guerra financiera. Ahí tenemos la lucha entre los grandes países petroleros que han llevado, por un tiempo, los precios del petróleo a un ridículo menos, menos, menos cero; ahí tenemos la guerra comercial entre una China pujante en su desarrollo económico y un EE. UU., cuya economía ya no se sustenta en reservas suficientes de divisas, sino en la fabricación monstruosa de papel moneda, sin ningún respaldo real; en la venta de armas a todo el mundo y el saqueo de las economías de los países débiles a través de los movimientos bursátiles del dólar. Un EE. UU., agonizante que se niega a morir. Esa guerra comercial ha provocado grandes pérdidas económicas a las dos potencias y por lo tanto, la quiebra de muchas empresas en el mundo. EE. UU. ha provocado el odio mundial, al auto instituirse unilateralmente como el policía del mundo, apoyándose en su poderío militar, lo cual, le hace sentir que puede apoderarse de las riquezas de los demás países, ya sea con embargos comerciales, impuestos arancelarios, presiones financieras, derrocamiento de gobiernos, invasiones, etc., sus abusos los están sufriendo la mayoría de los pueblos del mundo. A esto hay que sumar los conflictos regionales mundiales, las tensiones políticas y económicas entre las potencias por el predominio mundial, azuzadas por los dueños del dinero. Todo esto, hace del mundo un polvorín y abonan el terreno para la tercera guerra mundial; entonces, nuevamente se nos convocará a pelear por la democracia, por la libertad, por la religión, por la patria en peligro, etc., etc., etc., y los pobres pueblos engañados irán a la guerra. Así ha sido siempre, mueren millones de personas para enriquecer a unas pocas. Son los poderosos de la tierra quienes llevan a los pueblos a la guerra. (Despertemos y hagamos que despierten nuestras familias) Es urgente comprender que esos poderosos son creados por los pueblos, y son la viva expresión del egoísmo de las naciones. Recordemos que los pueblos son extensiones del individuo. El mal, el egoísmo, la raíz de la guerra se halla en el individuo; mientras el individuo continúe con su egoísmo, con sus ambiciones, con su odio, con su codicia, habrá pueblos así y éstos crearán líderes, jefes, poderosos, que los llevarán como bueyes al matadero, eso es todo. La crueldad individual se convierte en crueldad colectiva, el odio individual se convierte en odio colectivo, el egoísmo individual se convierte en egoísmo colectivo, la codicia individual se convierte en codicia colectiva, y la guerra viene a ser la tragedia espectacular donde quedan demostradas nuestras bajas pasiones. Resulta absurdo querer acabar con las guerras sin preocuparnos por la disolución del yo; mientras exista el yo habrá guerras. Solo el amor de los unos por los otros podrá evitar la guerra. En estos tiempos todo el que quiere hacerse famoso se convierte en paladín de la paz. Son muchos los que aspiran a ganarse el premio Nobel de la paz. Por estos tiempos se gastan muchos miles de dólares en propaganda pro paz como si la paz fuese cuestión de propaganda, sin embargo, la tercera guerra es inevitable. Mientras existan dentro del individuo los factores de la guerra, habrá guerras inevitablemente. Todos los tratados de no agresión resultan inútiles si dentro del individuo continúan existiendo todos los factores de la guerra. Los pueblos van a la guerra debido al odio, el egoísmo, la crueldad, la competencia y la codicia. La tercera guerra mundial será una consecuencia de la segunda y esta última una consecuencia de la primera. La codicia desorbitada, el conflicto de mercados, la competencia bárbara y el odio, llevarán a la humanidad a la tercera guerra mundial, aun cuando se hayan gastado millones de dólares en propaganda de paz y aun cuando se hayan ganado el premio Nobel muchos paladines. “No hay caminos para la paz, la paz es el camino”: Mahatma Gandhi. La tercera guerra mundial será peor que las dos guerras precedentes, y lo peor del caso es que esta vez sufrirá mucho más la población civil. La tercera guerra mundial será atómica, y el resultado de tantas explosiones nucleares, vendrá a ser por secuencia lógica, la descomposición del átomo en cadena. Cuando esto suceda los terremotos y maremotos se sucederán en forma catastrófica, entonces las ciudades caerán hechas ruinas como castillos de naipes. La energía atómica incontrolable puede provocar sismos y convulsiones marítimas espantosas. La bomba atómica acabó con el continente Atlante produciendo la revolución de los ejes de la tierra, entonces los mares cambiaron de lecho y la Atlántida se sumergió en el fondo del océano que lleva su nombre. Tradiciones arcaicas que se pierden en la noche aterradora de los siglos, afirman que la Lemuria fue destruida por la bomba atómica. Ya la humanidad ha pasado por dos grandes cataclismos geológicos provocados por la guerra nuclear. Cuando conocemos el pasado, profetizamos el futuro sin temor a equivocarnos porque el pasado se convierte en futuro debido a que el tiempo es redondo. Estamos al borde de un gran cataclismo y no queremos comprenderlo; así fueron también los atlantes en vísperas de la gran catástrofe. Necesitamos la transformación del individuo; necesitamos el cambio dentro del individuo, sólo así podrá transformarse el mundo. Estamos ante el dilema del ser o del no ser de la filosofía; o cambiamos o perecemos, eso es todo… ¡Alegraos porque ese cambio se puede dar si tú lo decides ya!… Enviado por: J. Isabel Mauricio Vargas. Rincón de Romos, Aguascalientes y Loreto, Zacatecas. Imágenes: 1. La Virgen del Apocalipsis. 1625. 2. La tercera trompeta del Apocalipsis de J. Meyer. 1666, Zurich. 3. The Virgin of the Apocalypse by Juan Correa. c.1689. New Spain (Mexico). La Ambición L a ambición es un monstruo de mil cabezas, una legión en sí misma. Se disfraza, se pone máscaras de santidad y de buenas intenciones y todo ello, nos complica su estudio, comprensión y eliminación. Uno de los orígenes de la ambición es sin lugar a dudas el miedo. Cuando tenemos miedo al mañana, al porvenir, al “qué dirán” o a la pobreza, surge entonces la ambición y la humilde empleada se convierte en ladrona o en prostituta, el joven mesero se convierte en el gánster, traficante o asaltabancos. En el proceso de comprensión de la ambición es por lo tanto impostergable enfrentarnos a nuestros miedos, estudiarlos y conocer sus mecanismos subconscientes más profundos, tal como se estudian nuestros defectos psicológicos. Este trabajo íntimo es para los verdaderos guerreros y guerreras, no cualquiera tiene el valor de enfrentarse a sí mismo. La ambición por lo tanto busca hacerse sentir, figurar, destacar, ser recordado, admirado, envidiado, “ser alguien”, ser diferente, creerse “superior”, es la causa de muchos problemas y conflictos entre las personas, es capaz de divorciar a los enamorados, dividir a los hermanos y llevar a los países a la guerra y a la destrucción. La ambición es la causa de robos, fraudes, de la esclavitud. Hay ambición en el capitalista que destruye la naturaleza para explotar sus recursos naturales y en el socialista que mata a su pueblo de hambre para robar sus ahorros en pro de la “igualdad”. No importa aquí el sistema económico, no hay uno mejor que el otro porque es el yo de la ambición el que siempre busca sacar provecho por sobre sus semejantes en el sistema en el cual se vive. Lamentablemente se educa a las mentes jóvenes con todos estos prejuicios y malos ejemplos para dedicar sus vidas a la búsqueda de riquezas o vivir bajo la presión y los complejos al no poder conseguir el “suficiente” dinero para recibir la aceptación social sembrando así la semilla de la desesperación y el conflicto. “El dinero en sí no es bueno ni malo. Todo depende del uso que hagamos de él. Si lo utilizamos para el bien, es bueno. Si lo utilizamos para el mal, es malo. Necesitamos a fondo comprender la verdadera naturaleza de la sensación y de la satisfacción, la mente que quiera llegar a comprender la verdad, debe estar libre de esas trabas.” - SAW Hay quienes ambicionan terriblemente el poder y se dicen llamar “luchadores sociales”, políticos zorros en todos los tiempos y en todos los rincones del mundo que engañan a los pueblos, pero una vez que logran el poder, se olvidan del dolor de millones de personas que les acompañaron y se convierten, con cinismo, en aquello que prometieron combatir. Hay ambiciones groseras, burdas, por dinero, riquezas o poder, etc., pero también hay ambiciones sutiles de logros espirituales. Al yo de la ambición le encanta esconder la ambición, entre sus tantas máscaras y facetas; se flagela ambicionando el milagro para sí mismo o para otro. Ambiciona no ser iracundo, orgulloso, lujurioso, etc., para alcanzar la bienaventuranza eterna. Hace terribles penitencias ambicionando poderes místicos, o anhela recibir el don de la sanación para ayudar a la gente “sin pedir nada a cambio” y que en su pose bondadosa de falsa humildad le besen la mano. En el fondo ambiciona ser idolatrado como un santo o ser llamado maestro, aunque no lo reconozca. Supimos del caso de un monje japonés que se alimentaba con semillas de los bosques para que su cuerpo se impregnara de esos aceites o resinas naturales, conservándolo como una especie de momificación, para ser adorado después de muerto. Así de irracional la ambición en todos nosotros, sin importar el objeto o el fin ambicionado. “Al yo le encanta vestirse de Santo y que lo veneren y que le pongan en los altares.” - SAW La ambición es comparable a un pozo profundo con cavernas y monstruos en su interior, y caras de santos y de demonios. La comprensión es la herramienta para explorar a consciencia y a detalle esas entrañas. “Cuando verdaderamente comprendemos a fondo y en forma clara y específica que somos ambiciosos y que cualquier esfuerzo que hagamos para acabar con la ambición es también ambición, entonces entendemos muy profundamente el significado de la ambición y nos resignamos. Hay resignaciones y resignaciones, pero este tipo de resignación nacido de la profunda comprensión trae un cambio radical a la mente porque extingue para siempre el fuego fatuo de la ambición.” - SAW PRÁCTICA 1º Acuéstese Ud. en forma de estrella abriendo piernas y brazos a derecha e izquierda. 2º Concéntrese ahora en sus propias necesidades físicas inmediatas. 3º Medite Ud. reflexione en cada una de esas necesidades. 4º Adormézcase tratando de descubrir por sí mismo, donde termina la necesidad y donde comienza la codicia. 5º Si su práctica de concentración y meditación interna es correcta, en visión interna descubrirá cuáles son sus legítimas necesidades y cuál la codicia. Recuerde que sólo comprendiendo profundamente la necesidad y la codicia podrá Ud. establecer cimientos verdaderos para el correcto proceso de pensar. Samael Aun Weor. Introducción a la Gnosis Enviado por: Rubén Soto O., instructor de los portales del ICQ en inglés y francés. Imágenes: 1.- David Teniers the Younger Año: 1648 Nombre: El hombre codicioso. 2.- Allegory of Fortune. Salvator Rosa. Fecha: 1659 La Mente-Corazón E stimado lector, hoy te invito a que reflexionemos sobre la crisis mundial que estamos viviendo. Si hacemos una revisión en los archivos de la historia, encontramos que la humanidad siempre ha estado en crisis, en guerras, en amenazas, en competencias políticas, económicas, religiosas, etc. Por todos lados se escucha de la nueva era, un nuevo amanecer, del despertar de la conciencia…, desafortunadamente nadie trabaja sobre sí mismo para lograr esa transformación interior, no hacemos un cambio individual radical, todo está basado en falsas promesas de todo tipo, en ideologías miserables de líderes que sacan provecho de los más necesitados, en creencias, en fe ciega. El ser humano moderno habla de la evolución, cree que hemos evolucionado a través de la historia y tristemente es todo lo contrario, la ley de la evolución y la ley de la involución trabajan juntas, todo evoluciona y luego involuciona, incluso el humano. No se logra la auto realización íntima o espiritual, a través de la evolución. El tiempo nos enseña que tanto la raza lémur, como la atlante eran humanidades muy evolucionadas que terminaron en barbarie, destruyéndose con la bomba atómica y nosotros “la raza Aria” no somos la excepción. Si verdaderamente queremos un cambio radical absoluto, necesitamos primero estar dispuestos a cambiar como individuos. Los individuos forman la sociedad, y lo que seamos como individuos, será la sociedad y lo que sea la sociedad, será el mundo que habitamos. El caos en el que vivieron nuestros antepasados, y en el que vivimos actualmente, incluso en el que vivirán nuestros descendientes, depende de nuestro estado psicológico, del nivel de ser y de las virtudes o defectos de nuestro corazón. Entre la mente y el corazón hay una gran complicidad, la mente actúa conforme lo que el corazón siente. Y si no trabajamos en la muerte de nuestros defectos psicológicos, nuestros deseos internos se manifestarán a través de nuestros actos de vandalismo, de vicios, guerras, masacres, familias desintegradas, de sufrimiento y dolor infinito. Necesitamos hacer un cambio radical como individuos, debemos pregonar con el ejemplo desde nuestro hogar como padres, como hijos, como hermanos. Necesitamos recuperar los valores del espíritu y manifestarlos a través de nuestros pensamientos, de nuestras acciones. Mientras pensemos con orgullo y actuemos con egoísmo, envidia, celos etc., nuestra raza también será destruida igual que las dos que nos antecedieron. Nunca se ha visto que a través de la violencia se genere un cambio positivo, ni como individuo, ni como sociedad. Nunca se ha visto que con odio se consiga el amor; nuestros defectos psicológicos tienen su sede en la psiquis, proviene del latín “psyche” y significa alma humana. Si queremos transformar al mundo, necesitamos previamente hacer una trasformación interna como individuos. ¿Cómo?, trabajando sobre sí mismos, eliminado los defectos del orgullo, pereza, envidia, gula, codicia, ira y lujuria, y cultivando las virtudes del alma: amor, paciencia, templanza, caridad, altruismo, castidad, diligencia, humildad. Estimado lector: que tu pan diario de cada noche sea la meditación; en un estado paz y relajación, reflexiona en tus acciones cotidianas, escudriña, busca información de los sucesos que te hicieron explotar de ira, o aquellos pensamientos que tuviste de celos, de odio, de envidia, de lujuria. Cuando lo detectes, analízalo, revisa ¿Cuándo surge?, ¿Por qué aparece?, ¿Se repite?, ¿Recuerdas cuándo fue la primera vez? ¿Dónde tiene su raíz? ¿En el Centro Emocional?; ¿En el centro Sexual?, ¿En el Centro Motor?, ¿En el Centro Instintivo?, ¿En el Intelectual? Una vez encontrado el defecto que más se repite en el diario vivir, debemos comprenderlo profundamente, para poder trabajar sobre el mismo, buscando la ayuda de nuestra Madre Divina. Nuestra responsabilidad es comprender para poder recibir la ayuda en la eliminación de dicho defecto. Defecto eliminado, deja el espacio libre para que florezca una virtud. Enviado por: Nelly López Villa. Hermosillo, Sonora. Imágenes: Cupido y Venus año. 1870-1924 autor Guillaume Seignac. “Yo no soy lo que me sucedió. Yo soy lo que elegí ser”. Carl Gustav Jung La Pluralidad del Yo E n ocasiones resulta más fácil comprender las cosas en base a lo que “no son”, en particular, cuando se trata de temas en los que la mente se encarga de poner bloqueos e inconvenientes con sus muchas distracciones, justificaciones, miedos, e inseguridades. Uno de esos temas es la comprensión de lo que es la Pluralidad del YO. La enseñanza de que “somos muchos” no se refiere a que “somos muchos los humanos sobre la faz de la Tierra”, sino que cada uno de nosotros lleva dentro de sí mismo “muchas personas”. El asunto es que según vivimos la vida, vamos de aquí a allá con preconceptos, ideas fijas, y en particular con el malentendido de que “persona” significa “ser humano”; esta definición sustituida ha sido un gran error. En el teatro griego, “persona” es el nombre que se le daba a la máscara que caracterizaba cualquier personaje dentro de una obra teatral, y no nos queda otra que darnos cuenta de que, en la tragicomedia que es nuestra vida, las causas y circunstancias que nos rodean definen la máscara con la que nos presentamos ante el drama. Cuando nos insultan respondemos con la máscara de la ira, cuando nos motivan nos ponemos la máscara de la ambición, y ante un banquete suculento, con gusto usamos la máscara de la gula. Son muchos los que están convencidos de ser individuos – que literalmente significa “indivisible” – y no se les puede culpar, pues 1) al momento en que nacimos nos asignaron un nombre, 2) durante toda la vida hemos asociado, a través de la memoria, nuestros momentos de dolor y alegría con tal nombre y tal cuerpo, y 3) cada persona o máscara de orgullo, de pereza, de envidia, etc., hace uso del mismo pronombre personal “yo”. Evidentemente hemos quedado convencidos de que “yo” es igual a “uno”. Sin embargo, sólo bastan unas pocas instancias de auto-observación directa para demostrar, hasta la saciedad, que en sí mismos cargamos con una multitud de personas distintas, esto lo vemos en las instancias donde muchos juraron amor eterno y después de varios años, perdieron el amor y abandonaron el hogar y la familia. Y muchos otros, menciona el Venerable Maestro Samael Aun Weor: “…juraron con lágrimas en los ojos trabajar por la Gnosis hasta el final de sus días. Prometieron a la Gran Causa fidelidad eterna y pronunciaron discursos tremendos. ¿Y qué? ¿En qué quedaron sus lágrimas de sangre? ¿En qué sus terribles juramentos? Todo fue inútil, sólo juró el yo pasajero de un instante, pero cuando otro yo desplazó al que juró fidelidad, el sujeto se separó de la Gnosis…” Muchos son los que se quejan por que sufren, pero no cambian; otros anhelan vivir la dicha del paraíso, pero no están dispuestos a transformarse; y de igual manera, varios los que buscan la felicidad, pero no están dispuestos a arrancar de sí mismos las causas de sus envidias, de sus codicias, de sus iras, orgullos, etc. Todas estas incongruencias claramente indican que detrás de toda contradicción mental existe una “máscara” con la que personificamos tal o cual defecto; y como la experiencia directa confirma estos hechos, con certeza podemos aseverar: “tenemos un cuerpo, pero no somos individuos”. En realidad, de verdad, la máquina física se encuentra bajo la influencia constante de muchas personas distintas y todas existen en nuestro interior. Si vemos escenas eróticas, la persona de la lujuria asume control del cuerpo y de inmediato busca satisfacer sus pasiones y sus deseos. Si creemos que otros han sido injustos con nosotros, la persona del resentimiento asume control del cuerpo y de forma mediata o inmediata, se rebela, discute, y hasta se torna en el más encarnizado enemigo público. Si un día queremos transformar nuestra apariencia física, salimos muy decididos y compramos ropas y máquinas de hacer ejercicio, pero al momento en que llueve, o se pone frío, o nos tenemos que levantar temprano para ejercitarnos, la persona de la pereza asume control del cuerpo y nos convence de que es muy temprano, de que estamos cansados, de que lo podemos hacer más tarde. Al fin y al cabo, ni nos ejercitamos, ni mejoramos nuestra salud, y todo sigue igual. Es por eso que la Gnosis nos invita a auto observarnos, para que podamos comprender cómo es que cada uno de estos defectos personificados influyen y afectan el funcionamiento de los cinco cilindros de la máquina humana, pues a nuestros defectos sólo les interesa satisfacer sus propios deseos y eso es todo. Si tomamos como ejemplo la máscara que personifica el defecto de los celos, podemos notar las formas en las que este Yo afecta la máquina humana con sus asociaciones ilógicas e incoherentes. Cuando por ejemplo un hombre ve que su esposa es tratada con cierto nivel de afecto por otro hombre, el condicionamiento y las asociaciones mentales borran rápidamente de su memoria los años de amor recibido, los afectos y las muchas consideraciones para limitarse a ver, entre la ilusión de sus fantasías, la falsa imagen de “infidelidad”. De inmediato el centro intelectual comienza a elaborar pensamientos vagos e incoherentes, a conectar situaciones que nada tienen que ver unas con otras, para crear un cuadro intelectual que “explique” o “se conforme” con esa falsa imagen. Si la esposa llegó unos minutos tarde, si la comida no estaba lista, o si hay trastes en el fregadero, todo eso lo convierte en “evidencia”. Bajo la creencia de estar herido, el centro emocional responde de forma negativa, sufriendo, proyectando una atmósfera de duda e incertidumbre, y esta respuesta demanda tanta energía que la máquina humana se siente incapaz de acción; se siente derrotada, aunque sea temporalmente, como una víctima ante el peligro de muerte. Ante estas reacciones, el centro creador, que es fuente de un poder trascendental, capaz de transformarnos radicalmente, comienza a drenar su energía para satisfacer la demanda de los cilindros de la máquina humana. Esta fuerza que bajo circunstancias normales se pondría en uso para nuestro trabajo interior profundo, se pierde regida por los principios de la termodinámica, pues es consumida por el aumento del caos de la mente (entropía), los sentimientos (la energía interna), y las acciones (la entalpía). Por último, el centro instintivo, que responde con impulsos de supervivencia, se convierte en una fuente de “malas vibras”, invitando consideraciones a nivel intelectual de que “esto no lo merezco”, “no puede ser que esto me pase a mí”; a nivel emocional considerando que hay que salvar “mi integridad” o “no honor de hombre”; y a nivel físico considerando “hay que tomar acción”. Así, de pronto y de la nada, la pobre mujer regresa a su casa, para encontrarse con gritos, lamentos y en el peor de los casos, una golpiza. Lamentablemente cada efecto se torna en una causa, y toda causa siempre genera nuevos efectos, por lo que estos ciclos degeneran en niveles más inferiores, en cadenas incesantes de causas y efectos que atrapan a los actores en el drama en incesantes sufrimientos. Esta misma secuencia de eventos se repite con todos nuestros defectos de tipo psicológico: - El ego reacciona desatando una cadena de eventos ante la imagen que se forma en su mente sin saber que la imagen es sólo una apariencia y no “la cosa en sí”; - El intelecto responde en patrones ilógicos e incoherentes, - La emoción responde de forma negativa, - La energía vital se pierde buscando satisfacer la demanda del ego, y por último, - Todo se materializa en cadenas de causas y efectos. El Maestro Samael dice que “detrás de cada pensamiento y detrás de cada acción existe un agregado psicológico”. Con las palabras del Maestro y conociendo la secuencia de eventos que suceden a nivel interior, no solamente podemos entonces comprender la “Doctrina de los Muchos”, sino que nos podemos preparar para tomar acciones superiores: observando, comprendiendo y a través del fuego serpentino de nuestra Divina Madre interior, eliminando nuestros defectos. Cada defecto eliminado libera cierto porcentaje de consciencia, por consiguiente, el camino al despertar no se consigue a través de seminarios, organizaciones, de Reiki, de Feng Shui, o de “limpiezas emocionales”; todo comienza por reconocer la necesidad de cambiar y el auto sacrificio que requiere el trabajo en sí mismos. Que todos los seres sean felices. Enviado por: Ricardo Santana. Instructor ICQ. Arizona, USA Imágenes: 1.- Donne di Roma si radunano al Campidoglio Año: 1604 Autor: Pieter_Isaacsz. 2.- El Espejo de vestir Año: 1876 Autor: Berthe Morisot. 3.- Danza de campesinos Año: 1568 Autor: Pieter Brueghel el Viejo Civilización y Barbarie V ivimos en un mundo maravilloso, donde los sonidos de la naturaleza son extraordinarios, el canto de las aves; la luz descompuesta y fraccionada en todas las partículas de la materia, nos entregan la percepción de colores asombrosos, el azul celeste y muchas variantes, el violeta, morado y múltiples matices de las flores, parece que nos invitan a buscar una mejoría en las actitudes humanas y a exaltar las virtudes y cualidades del alma, muy lejano a encontrar dichas cualidades del alma en forma mecánica; realmente parece ser que se requiere un shock de conciencia, una psicología revolucionaria y no mera mecanicidad, pues si bien podemos observar que ha habido evolución en todas las culturas, es innegable la involución y en el ser humano podemos decir que así mismo, ha habido evolución e involución que la identificaríamos como barbarie, abandono de los estados de civilización. Parece que el arco y la flecha se han quedado atrás por motivo de la civilización, parece que la época de la piedra y las cavernas son situaciones del pasado también por la civilización, sin embargo barbarie podemos encontrar cuando cientos de personas viven en casas diminutas, semejantes a ratoneras, alejándose de la percepción de la belleza de la naturaleza; parece ser que la barbarie de la convivencia entre seres humanos terminaría cuando comenzó a utilizar el diálogo, leyes, reformas y cuidados para el ciudadano; parece que la época del viejo oeste, en las que en un principio el ser humano buscaba expandirse y encontrar nuevos horizontes para un mejor vivir, terminaron con la barbarie de las armas para mantener las tierras y propiedades y ahora la barbarie utiliza las mismas leyes, acuerdos, escritos y reformas para defender los delitos, injusticias y crímenes de la actual civilización, convirtiéndose en un ciclo vicioso. Si bien grandes personajes, intentando llevar a sus países gobernados a una mejor civilización lo lograron en un principio, más tarde sufrieron el cataclismo de la barbarie, pues los arcos y flechas se convirtieron en bombas atómicas, ametralladoras y fusiles, convirtiendo a los seres humanos en bárbaros con trajes y criminales de cuello blanco. Ahora la sociedad sufre esclavismo, con jornadas de trabajo largas y de poca paga, enfermedades que son difíciles de atender por la falta monetaria de los enfermos y que, a pesar del gran desarrollo tecnológico, personas mueren por falta de recursos para poder solventar los cuidados médicos. De qué sirve tanta tecnología, si el ser humano pretende esclavizar a sus semejantes con impuestos impagables a los que las personas prefieren no estar reconocidos, porque si se reconocieran, sería imposible solventarlos. Qué estado de barbarie es éste, en el que se gastan millones de dólares en espectáculos, lujos y tecnologías, cuando las personas apenas alcanzan para medio comer, medio nutrirse, medio vestir. ¿A qué llamamos civilización?, ¿Acaso a la ciencia aplicada para crear guerras biológicas o enriquecimientos a costa del dolor de muchas personas?; tal parece ser que la barbarie ha llegado nuevamente e iniciado los tiempos del fin de esta humanidad. Podemos decir que un individuo es civilizado, cuando camina por la senda de la revolución de la conciencia, es civilizado, cuando se rige por los principios del alma, la verdad, la justicia, honorabilidad y honestidad; y marcha por el camino de la barbarie, cuando se abandona a los prejuicios haciéndose víctima del batallar de la mente con tantos juicios cayendo en las argucias del agregado psicológico, como la ira, la envidia, etc. Ha llegado el momento de revolucionar la conciencia, de trabajar con la libre iniciativa individual, pues también está comprobado que cuando no hay libre iniciativa individual, la inteligencia retrocede, involuciona. Los Stalin, los Lenin, crearon sociedades con fundamentos socialistas que en un principio ayudaron manifestando cierta civilización a las carencias del pueblo, pero que, a fin de cuentas, ese socialismo involucionó haciendo caer a esos estados en una barbarie de abuso de la libre iniciativa individual, socavando las cualidades del alma de cada persona. Estamos en los tiempos del fin y es momento de levantar en alto la antorcha de la luz de la sabiduría y seguir el camino de la revolución de la conciencia. Enviado por: Francisco Ismael Moreno Luna, Comisión de Calmécac, ICQ. Imágenes: 1.- El Corazón de los Andes Autor: Frederic Edwin Church - Año: 1859. 2.- Fuente de la Alhambra. 2019. Fidelia Castro. “Considerar vuestro origen. No fuisteis formados para vivir como brutos, sino para seguir la virtud y el conocimiento”. La Divina Comedia. Los Tiempos del Fin V ivimos en un mundo hermoso, con una naturaleza pródiga, preciosos mares y montañas nos rodean, más sin embargo estamos en extinción, ya por desastres naturales y también por parte de la humanidad; formamos una sociedad materialista que nos impide ver o saber el verdadero objetivo de nuestra existencia. En este mundo estamos ante dos caminos: llegar a nuestro verdadero origen o involucionar y degenerarnos, debemos comprender que somos parte de un espíritu o Dios, nos corresponde decidir qué camino elegir, el círculo exotérico es el de las multitudes y el esotérico corresponde a la humanidad divina. En este plano físico existen muchas escuelas, logias, órdenes, sociedades pseudo esotéricas, religiones, las cuales más que ayudar, confunden al aspirante, sin embargo, pueden ser buenas porque enseñan los principios elementales del conocimiento y pueden ayudar a lograr un cambio positivo en la persona, por ejemplo, las Cuatro Nobles Verdades y los ocho preceptos del budismo. Difícil es decidir debido a que estamos en la última etapa de nuestra raza Aria, la edad de hierro, la más densa, llena de gente mecanizada, donde triunfa el mal, nos identificamos con los problemas de la vida diaria, dejando pasar la oportunidad que tenemos de alcanzar la iluminación interior. Lograr la integración del Ser es el mayor anhelo de todo iniciado y es lo que llamamos autorrealización, el Ser es múltiple en sus manifestaciones y se compone de muchas partes, para integrarlo debemos rebelarnos contra nuestra propia naturaleza egoica, que es antítesis de lo divinal, para lo que requerimos de mucha paciencia, voluntad, tenacidad y valor. El verdadero Ser o Espíritu aún no ha entrado en nosotros porque el Yo ha invadido el reino del alma. El mal llamado hombre todavía está en proceso de creación, cuando eliminemos de nuestra psiquis todos los pecados o errores, además si logramos crear los vehículos solares y el sacrificio por la humanidad, es cuando realmente nos convertimos en hombres o mujeres auténticos. En los seres humanos comunes cuando muere el cuerpo físico y se desintegra, lo que continúa y retorna es el ego para satisfacer sus vicios y deseos, el verdadero Ser, después de la muerte vive completamente despierto con sus cuerpos internos, gozando en esas regiones de dicha y felicidad. Este mundo físico es el valle de las amarguras, la rueda del Samsara, girando incesantemente, el ego va y viene, encarnándose en cada existencia, sufriendo, buscando sin hallar; quien quiera liberarse de esta rueda, debe disolver el ego y encarnar su alma, la rueda de la retribución es terrible, la humanidad que lo habita es esclava de las leyes naturales y cósmicas. La naturaleza es implacable y el nacimiento de un Ángel hombre, cuesta millares de víctimas, “Muchos son los llamados y pocos los escogidos”. Cristo dijo: De mil que me buscan uno me encuentra; de mil que me encuentran, uno me sigue y de mil que me siguen, uno es mío.” La tierra físico-química también ha quedado regida bajo las leyes del karma planetario, el fuego mundial poco desarrollado y cargado de karma ha originado una evolución lenta, pesada y terrible, de los millones de seres humanos que han habitado este planeta son muy pocos los que han evolucionado como Maestros o grandes iniciados. El karma mundial lo estamos viviendo con terremotos, incendios, epidemias, terremotos, hambre, miseria, violencia, etc. y para equilibrar nuestra balanza, es urgente y necesario aceptar los errores cometidos, comprenderlos y eliminarlos, cultivar una actitud serena, así como el sincero anhelo por una transformación radical en nuestro interior que se verá reflejada hacia el exterior. Buda menciona que el pensar, hablar, sentir y actuar con ética, es uno de los primeros pasos que debemos seguir antes de dirigirnos hacia un conocimiento espiritual. Las Cuatro Nobles Verdades constituyen el fundamento de la filosofía budista, la primera de ellas, nos dice el Buda que por medio de la meditación llegó a descubrir que el sufrimiento lo originamos nosotros mismos, el dolor es el resultado de nuestros propios errores, porque no somos perfectos, ya que tenemos el YO dentro, cuando el ego desaparece adviene a nosotros la auténtica y verdadera felicidad. La segunda gran verdad nos dice: El nacimiento es sufrimiento, también lo es la vejez, la enfermedad y la muerte, la causa del dolor es el deseo y los cinco venenos que son; apego, odio, ignorancia, ego y celos, estos elementos nos causan una serie de perturbaciones y éstas son nuestros peores enemigos, cuando la consciencia despierta, la ignorancia desaparece y el temor deja de existir. La tercera gran verdad se refiere a que el sufrimiento puede ser vencido, es en los momentos más difíciles, en las circunstancias más adversas donde descubrimos nuestros principales defectos con el sentido de la auto-observación aunque atrofiado en el ser humano; sin embargo, a medida que lo utilizamos se va desarrollando. La cuarta gran verdad es el camino que nos lleva al cese del sufrimiento y esa senda es el Óctuple Sendero. Es la vía que conduce al Nirvana, a la verdadera felicidad. Este camino son ocho etapas que deben combinarse entre sí al practicarse. Antes de dormir conviene que hagamos una retrospección para examinar los hechos del día y detectar los errores cometidos. El yo psicológico gasta torpemente el material psíquico en los defectos que se manifiestan en la convivencia diaria con nuestros semejantes o familiares, con los amigos, en el trabajo, en la calle, etc., es el espejo donde podemos vernos reflejados tal y cual somos. Todo defecto debe ser llevado a la meditación para analizarlo y comprenderlo en todos los niveles de la mente y posteriormente ser eliminado por ese poder superior derivado de nuestro Ser, llamado Devi Kundalini, María, Maya, Isis, etc. nuestra divina madre interior. Necesitamos avivar la llama del espíritu con la fuerza del amor. Necesitamos desarrollar la comprensión creadora. (Samael Aun Weor). Enviado por: María Guadalupe Licea. San Luis Potosí, S.L.P Imagen: La muerte en un caballo pálido. Autor Batchheizer. Año 1796. “Cuando me preguntaron sobre algún arma capaz de contrarrestar el poder de la bomba atómica yo sugerí La mejor de todas: La paz.” Albert Einstein La Cooperación C uando varias voluntades se unen en una misma dirección, hacia una misma causa noble y justa, no hay poder sobre la Tierra que pueda detenerlas. Comentan las tradiciones milenarias del oriente que una vara de bambú sola, fácilmente se rompe, pero que cuando se juntan varias, aunque son frágiles nadie puede romperlas. Todos anhelamos que se lleven a cabo las obras que sirvan a la humanidad, pero esto requiere que haya sinceridad, fraternidad, unión, alegría, respeto y veneración. Es una verdadera lástima que todo esto esté tan lejos de nosotros. Lo que abunda en uno es el egoísmo, el deseo de resaltar, de ser admirado, de subir al tope de la escalera, de querer que nos rindan culto; por lo que cada vez existe menos la posibilidad que se realicen las obras buenas que necesita el mundo. Aunque no todo está perdido, cada ser humano tiene en el fondo un pequeño porcentaje de conciencia despierta, es minúsculo, pequeñísimo; pero bien puede ponerse en actividad, esa es la tarea que tenemos todos, sacar eso bueno desde el fondo, a veces súper escondido, pero hay que hacer esfuerzos y súper esfuerzos para que se manifieste. Cuando se coopera en forma sincera, el progreso de cualquier organización es inevitable, se pueden lograr los objetivos que parecen imposibles. Si alguien, una sola persona se propone ayudar a la humanidad desinteresadamente, hay un coro de seres divinos que la respaldan; ahora, cuando son varias, cuando se fusionan los anhelos, cuando se trasciende la competencia y el egoísmo, es como un río con mucha fuerza, como un tren en marcha, como las olas del mar que siempre llegan a su destino final, sin que nadie pueda detenerlas. Muchos pensamos equivocadamente que, sólo con dinero se coopera, eso es completamente falso, hay muchas formas en que uno puede colaborar por el bienestar común. Aunque parezca increíble, cuando uno riega un árbol, sin que se lo pidan, y lo hace constantemente, no sólo un día, sino siempre, aparentemente eso no tiene ninguna repercusión, pero un árbol tiene la capacidad con su sola presencia de relajar a las personas y puede entonces disminuir la violencia, sirve de casa a los pájaros que nos alegran el día con su canto, dan sombra a nuestro descanso, nos dan oxígeno y decenas de cosas más. Y no se necesita dinero para eso, es sólo poner en juego la voluntad, dejar a un lado la pereza, la negligencia y la justificación. Hace muchos años, entregábamos la gnosis en una ciudad pequeña; de un poblado más pequeño, iba un estudiante de ocupación mecánico, humilde, trabajador, de raíces de gente de campo; frecuentemente nos invitaba a comer a su casa; iba por nosotros, nos daba de comer y nos regresaba. Comíamos muy contentos huevos de rancho, frijoles cocidos en olla de barro, tortillas recién hechas, etc. Un día, cuando alegremente comíamos, dijo en tono muy serio: “He meditado durante un buen tiempo y ya se lo que tengo que hacer para ayudar a la humanidad…”, interesados por el tono en que lo comentaba, le pusimos mucha atención a lo que expresaba, y continuó diciendo: “Voy a tenerles su carro siempre arreglado, de mi depende que siempre ande al 100%”, entonces le preguntamos verdaderamente intrigados, que eso, de qué forma podría ayudar a los demás. Continúo diciendo emocionado: “Sé que constantemente salen a dar la gnosis a diferentes partes del país y he pensado que, si el carro está listo para cualquier cosa, más gente podrá recibir estas enseñanzas”. ¡Vaya!, sí que parecía incongruente, hasta descabellado, pero realmente no le faltó la razón. Durante más de dos años, el tiempo que duramos ahí, cumplió su palabra cabalmente y realmente gracias a su labor, fue posible dar seminarios en diferentes ICQ del país, sostener un instituto que no tenía instructor y muchas labores más. Con ello, quedó hasta la saciedad demostrado, que no es necesario el dinero para ayudar a los demás, que lo que se requiere es amor, cariño, lealtad, sinceridad, fe, constancia, diligencia y un sentido de responsabilidad, más allá de la auto compasión y de las justificaciones sin sentido. Un gran sabio oriental, de nombre Santideva nos mostró de qué manera podemos nosotros llegar a transitar el camino de la verdadera cooperación en su enseñanza de “La inversión del yo y del otro”. Nos explica en forma muy didáctica este gran ser, que ese sentimiento egoísta que nos caracteriza, nos llevará inevitablemente al fracaso. El querer lo mejor para uno, a costa del sufrimiento de los demás; buscando siempre seguridad, teniendo como fondo el miedo, nos convierte en explotadores, mentirosos, estafadores. Sin embargo, siempre tenemos una gran justificación. Pero, ahí está el secreto… Eso que buscamos para sí mismos y que nos lleva al fracaso, si lo buscamos para los demás, nos transformará positivamente y nos llevará por el camino correcto. Esa es la inversión del Yo en el otro. Todo lo que deseamos, que buscamos, que creemos necesitar, tratemos de que los demás lo tengan, esto nos llevará a cambiar nuestra vida completamente. Nos dice este gran iniciado: “Si doy, ¿qué tendré para comer? Este egoísmo hará de ti un ogro. Si como, ¿Qué tendré para dar? Esta generosidad hará de ti el rey de los Dioses”. “Cualquiera que haga padecer a otro por sí mismo arderá en los infiernos, cualquiera que padezca por otro tiene derecho a todas las felicidades”. Uno se cree muy inteligente, cuando hace que los demás trabajen por uno, pero no se da cuenta que está cavando su propia tumba, su propio dolor. Respecto a esto nos dice: “Aquél que impone a otro la tarea de trabajar por él tendrá como retribución la esclavitud; aquél que se impone la tarea de trabajar por otro tendrá como recompensa el poder”. “Todos los que son desdichados, lo son por haber turbado su propia dicha; Todos los que son felices lo son por haber buscado la dicha de otros”. Sentir lo que el otro siente, tratar de ponerse en el lugar de los demás es la ley universal, claramente expresado por Santideva de la siguiente forma: “Así pues, para apaciguar mi dolor y el del otro, yo me entrego a los otros y adopto a los otros como yo”. “Pertenezco a los otros, esta debe ser tu convicción. ¡Oh corazón mío, el interés de todos los seres debe ser en adelante tu único pensamiento!”. Han pasado siglos de que enunciara estas sagradas enseñanzas y a pesar del tiempo y el espacio, son más actuales y efectivas que cualquier discurso de politiquería actual. Explicando estas enseñanzas de Santideva, el V.M. Samael Aun Weor profundiza: “Realmente el único yo que nosotros los Gnósticos debemos aceptar como nuestro es el yo del prójimo. Los sufrimientos del prójimo, el dolor ajeno.” “Los leones de la ley, los Señores del Karma no tienen yo, pero consideran como yo a cada persona, a cada semejante, a cada criatura”. “Ellos siendo tan perfectos se han adaptado a sí mismos al yo ajeno de cada persona del mundo y llenos de dolor exclaman: yo soy ladrón, yo soy fornicario, yo soy adúltero, yo debo mucho Karma”. “Los grandes seres adoptan como yo al yo del prójimo. Ningún maestro de la humanidad dice: yo soy perfecto, yo soy santo, yo soy poderoso, etc., los perfectos sólo dicen: “Cada uno de nosotros es un mal caracol entre el seno del padre”. Jesús el Cristo dijo: “No hagas a otros lo que no quisieras que te hagan a ti mismo”. Realmente uno se asombra ante los atormentadores, de ninguna manera ellos quisieran ser atormentados.” “¿Qué les pasa pues? ¿Por qué atormentan? Se necesita estar dormido para atormentar al prójimo... ellos realmente están dormidos, tienen la Conciencia profundamente dormida, eso es todo. La inversión del yo y del otro nos lleva hasta la cooperación consciente.” Finalizamos esta reflexión con una frase maya: “In Lak’ Ech A Lak’ En” (Tu eres yo, yo soy tu) y con el significado del mantram “Om Mani Padme Jum” que se pronuncia en meditación así: “Om Masi Padme Yom” y quiere decir: “Tú estás en mí, yo estoy en ti”… Enviado por: Jenaro Ismael Reyes Tovar. Comisión Cursos por Internet. Fotos de iconografía Inca tallada sobre Serpientes Lugar: Calle Siete Culebras, Ciudad del Cusco Perú. Albaro René Murillo Montaño. Bibliografía: El Cristo Social. Capitulo XXVI Cooperación La Sabiduría del Ser 2 www.samaelgnosis.net Instituto Cultural Quetzalcóatl - Gnosis La Sabiduría del Ser 1 www.samaelgnosis.net Instituto Cultural Quetzalcóatl - Gnosis La Sabiduría del Ser 20 www.samaelgnosis.net Instituto Cultural Quetzalcóatl - Gnosis