Biografía Esotérica de Beethoven

¡Hola amigos! Vamos a estudiar ahora la biografía esotérica del Maestro Beethoven.

Ludwig Van Beethoven, Joseph Karl Stieler en 1820

Ludwig Van Beethoven, Joseph Karl Stieler en 1820

Ludwig van Beethoven mejor conocido como Beethoven, nació el 16 de diciembre de 1770 en Bonn, Alemania y falleció el 26 de marzo de 1827 en Viena, Austria

Beethoven creció en Bonn, Alemania, fue compositor, director de orquesta, pianista y profesor de piano alemán. Su legado musical abarca, cronológicamente, desde el Clasicismo hasta los inicios del Romanticismo. Es considerado uno de los compositores más importantes de la historia de la música.

En toda su trayectoria musical, Beethoven dejó para la posteridad un importante legado: nueve sinfonías, una ópera, dos misas, tres cantatas, treinta y dos sonatas para piano, cinco conciertos para piano, un concierto para violín, un triple concierto para violín, violonchelo, piano y orquesta, dieciséis cuartetos de cuerda, una gran fuga para cuarteto de cuerda, diez sonatas para violín y piano, cinco sonatas para violonchelo y piano e innumerables oberturas, obras de cámara, series de variaciones, arreglos de canciones populares y bagatelas para piano. Pero su obra más famosa fue las Nueve Sinfonías, Sonata a la luz de la Luna, Para Elisa, Fidelio y Misa Solemne 3.

Se dice que el Maestro Beethoven era sordo y así componía la Novena Sinfonía, pero no es así. Él es un Iniciado, conoció y practicó la Gnosis, y entre sus facultades que poseía salía en Astral y en ese mundo realizaba sus trabajos de composición.

El Maestro Beethoven está encargado de la música de las esferas, esto es que tiene a su cargo el sostener los mundos para que todos los planetas giren firmes en su marcha. Nosotros nos quedamos extasiados escuchando sus composiciones como las Nueve Sinfonías de Beethoven.

La música clásica viene de los Mundos Superiores y tiene el poder de despertar conciencia en esos mundos. Es el Verbo de Dios. Debemos cultivar el arte por la música que estar perdiendo el tiempo en vanos razonamientos.

Con la música clásica, el gnóstico encuentra un inmenso campo de exploración mística, porque no es música de forma sino de ideas arquetípicas inefables; reales. Cada nota tiene su significado, cada silencio es una emoción superior.

Ludwig Van Beethoven, imagen de fondo

Ludwig Van Beethoven, imagen de fondo

Toda acción recta, es música de luz; sin embargo, toda acción equivocada es música fatal. La música moderna o música negativa, como el mambo, la cumbia, y toda esa música de hoy es música infernal, es música del abismo que nos lleva a las bajas pasiones, adulterios, fornicaciones, odios, borracheras, crímenes, etc.

Nosotros necesitamos trabajar nuestra mente que actualmente está al servicio del ego, con la autoobservación psicológica y la desintegración de los yoes con el apoyo de nuestra Divina Madre Kundalini.

Entonces así trabajará nuestro Centro Emocional Superior, aunque sea por breve tiempo, sin el proceso del pensar, entonces viene el arrobamiento al escuchar la música de Beethoven muy especialmente resulta extraordinaria para hacer vibrar intensamente nuestro Centro Emocional Superior. También podemos escuchar otras sinfonías majestuosas de un Wagner, Mozart, Chopin, Liszt, etc.

Con esto probamos que la Voluntad es música, y que toda acción es hija de la música. Las palabras humanas son música articulada, a veces son palabras dulces, serenas como melodías inefables y otras ocasiones son notas discordantes e infernales. La palabra, el verbo es un arma terrible, tanto para el bien como para el mal.

Como un Maestro Iniciado, Beethoven estuvo sometido a experiencias y pruebas. Una de ellas es el sentir los rigores de la “Noche Espiritual” que son épocas en que estamos en la más tremenda soledad. Separados de toda Espiritualidad. En los Mundos Superiores no lo reciben porque no se lo merece; abajo en los mundos infiernos ya no lo quieren porque se ha convertido en un enemigo. Esta es la “Noche Espiritual.”. Son muy pocos los que logran pasar esta prueba tan dura. Sus síntomas son: Falta de Iluminación Interna, Aburrimiento, Fracaso Sexual, Hastío, Desesperación, Materialidad en Alto Grado, no existe ningún rayo de luz, ni una gota de esperanza.

La “Noche Espiritual” se da en todo Iniciado, ya sea hombre o mujer, puede durar meses o muchos años, el tiempo puede variar. La mayor parte fracasan, y escapan.

Pero existe una sola vía que nos permite salir lo más pronto de esa soledad y silencio y es la de la Meditación. Cuando nuestra mente quede quieta y en silencio adviene lo nuevo para él o ella.

Beethoven al sentir esta prueba la “Noche Espiritual” en vez de fracasar como muchos, abrió sus ojos de su Intuición al Super naturalismo Misterioso, a la parte espiritual de la Naturaleza, donde viven los Reyes Angélicos de esa región.

Y este gran músico filósofo, Beethoven, a lo largo de su existencia que fue muy ejemplar, tenía sobre su mesa de trabajo a su Divina Madre particular. Este Gran Maestro puso al pie de aquella figura adorable una inscripción de puño y letra del mismo, lo siguiente: “Yo soy la que ha sido, es y será, y ningún mortal ha levantado mi velo”

El progreso en el trabajo íntimo trascendental es imposible sin el auxilio de nuestra Divina Madre Tonantzin, La Divina Madre Kundalini, Neith, la Suprema Isis Egipcia.

Todos debemos ser agradecidos y amar a nuestra Divina Madre. Beethoven amaba entrañablemente a la suya.

¡Oh, Devi Kundalini! Tú eres Lakshmi, la esposa de Vishnú, ¡Madre Adorable! Tú eres la divina prometida de Shiva ¡Virgen Venerable! ¡Tú eres la acuosa Sarasvati, la consorte de Brahama!

El Maestro Beethoven se encuentra en el Mundo de las Causas Naturales y el Maestro Samael cuando visitó esa región comprendió la necesidad de obedecer al Padre en la Tierra como en el Cielo. Debido a que en esa región se encuentra el Paño de la Verónica que significa “Voluntad Cristo”, esto significa que hay que hacer la voluntad del Padre.

Fue una experiencia interesante ya que ingresó al Templo de la Música de las Esferas, en el umbral de ese Templo, vio a un guardián que parecía un relámpago: era el Maestro Beethoven. Estos hombres causales se desenvuelven maravillosamente bajo la Dirección de su Íntimo, su Dios Interno.

Solo el Hombre Causal ha logrado definitivamente la inmortalidad, y esta clase de personas están mucho más allá del bien y del mal.

Acudió a una ceremonia y al final dio gracias a su Gurú “Adolfito” quien le contestó “¡no me des las gracias! “Lo que necesito saber es como os vais a portar ahora en la vida”

Dentro del chacra del corazón existe un espacio hexagonal de color azabache. Allí resuenan como una Sinfonía de Beethoven los diez místicos sonidos de la Iglesia de Tiatira. Esos son los grandes ritmos del Mahavan y del Chotaban que sostienen al universo firme en su marcha. Los ritmos de fuego son el fundamento de las exquisitas armonías del diapasón cósmico. El Universo se sostiene por el Verbo.

En ese Mundo existe la música y el sonido. Ahí se encuentra el Templo de la Música de las Esferas y uno de los guardianes es el Maestro Beethoven. Es un Gran Iniciado, sus nueve sinfonías son maravillosas. Todo el que llega a esa región tiene que aprender las nociones fundamentales de la Música porque es el Verbo.

Las nueve Sinfonías de Beethoven, y muchas otras grandes composiciones clásicas, nos elevan a los Mundos Superiores. Si nos concentramos en este tipo de música observaremos en ella como la abeja en la miel, producto de todo su trabajo.

El Elemental del Azafrán está íntimamente relacionado con los grandes apóstoles del arte, como Beethoven, Mozart, Berlioz, Wagner, Bach. El Planeta del azafrán es Venus, la estrella del amor.

Ahora vamos a recitar un famoso poema de Amado Nervo:

EL DIA QUE ME QUIERAS

El día que me quieras tendrá más luz que Junio;

la noche que me quieras será un plenilunio,

con notas de Beethoven vibrando en cada rayo

sus inefables cosas,

y habrá juntas más rosas

que en todo el mes de mayo.

Mil fuentes cristalinas

irán por las laderas

saltando cantarinas.

El día que me quieras, los sotos escondidos

resonarán arpegios nunca jamás oídos.

Éxtasis de tus ojos, todas las primaveras

que hubo y habrá en el mundo, serán cuando me quieras.

Cogidas de la mano cual rubias hermanitas

luciendo gotas cándidas, irán las margaritas

por montes y praderas

delante de tus pasos el día que me quieras...

Y si deshojas una, te dirá su inocente

postrer pétalo blanco: ¡Apasionadamente!

Tendrán todos los tréboles cuatro hojas agoreras,

al levantar el alba del día que me quieras,

y en el estanque, nidos de gérmenes ignotos,

florecerán las místicas corolas de los lotos.

El día que me quieras será cada celaje

ala maravillosa; cada arrebol, miraje

de las Mil y Una Noches, cada brisa un cantar

cada árbol una lira, cada monte un altar.

El día que me quieras, para nosotros dos

cabrá en un solo beso

la beatitud de Dios.

Amado Nervo

“La verdadera música es la música clásica. La música es la Palabra del Eterno. Nuestras palabras deben ser música inefable, así sublimamos la energía creadora hasta el corazón…” Matrimonio Perfecto, cap. 8.

Ma. Guadalupe Inclán

Biografía: Varios libros y conferencias del Maestro Samael Aun Weor. IMAGENES: Ludwig Van Beethoven, Joseph Karl Stieler en 1820

Descargar en: Word | Word Comprimido | Pdf | Solo Texto | Índice | 01 | 02 | 03 | 04 | 05 | 06 | 07 | 08 | 09 | 10 | 11
Suscribirme